Iván Cruz ha señalado que la presencia de una patrulla permanente de la Guardia Civil en el municipio, sumado a las dos patrullas de la Policía Local, una de ellas con agentes de municipios cercanos, así como el refuerzo de seguridad privada contratada desde el Ayuntamiento "ha aliviado considerablemente la tensión".

Fue el propio alcalde el que contactó con la Subdelegación del Gobierno en Jaén para comunicar determinados problemas relacionados con la seguridad que se estaban produciendo en los últimos días del pasado mes de noviembre, además de poner de manifiesto la imposibilidad de hacer frente a esa llegada importante de temporeros con los medios propios de la Policía Local.

A raíz de esa petición, la Guardia Civil diseñó un despliegue especial que ha consistido en un incremento de la presencia de agentes en la localidad, así como una intensificación de los puntos de identificación de personas y vehículos.

Como consecuencia de uno de esos operativos se procedió a la detención de 18 personas por infracción de la Ley de Extranjería, al no contar con los permisos necesarios para estar en el país. Fueron conducidos por la Guardia Civil a las dependencias de las comisarías de la Policía Nacional de Jaén, Linares y Úbeda, donde se tramitaron los correspondientes expedientes de expulsión.

HECHO AISLADO

La muerte en el tajo el pasado sábado de un trabajador inmigrante sin la documentación en regla cuyo cadáver fue abandonado por el dueño de la finca en el centro de salud de Pozo Alcón ha vuelto a poner al municipio en el punto de mira.

El alcalde ha querido dejar claro que "no todos los agricultores son iguales", al tiempo que ha mostrado su repulsa por lo ocurrido. El dueño de la finca en la que falleció el trabajador como consecuencia de un infarto está acusado inicialmente de un delito contra los derechos de los trabajadores. Según la investigación este vecino de Honojares (Jaén) llegó a un acuerdo verbal con el trabajador fallecido y de nacionalidad marroquó para que echara el jornal en su finca.

El fallecido era uno de los temporeros extranjeros que se encuentran en Pozo Alcón esperando a trabajar en la campaña de aceituna, con la dificultad añadida de no tener la documentación en regla.

En este sentido, el alcalde ha apuntado que se han mantenido reuniones con los olivareros en las que se han puesto de manifiesto lo que conlleva llevar a los tajos trabajadores sin contar con la documentación en regla y hacerles el correspondiente contrato.

Además, Cruz ha apuntado que la responsabilidad de los olivareros debe ir más allá de darles trabajo y deben facilitar una condiciones "dignas" a las personas que se desplazan para trabajar en la campaña de aceituna.

Pese a que en el municipio va regresando la calma, por redes sociales se está moviendo una concentración para este viernes con el fin de exigir más medidas seguridad en el municipio. En este sentido, el alcalde ha apuntado que este año han sido cuatro los policías locales que se han jubilado, lo que ha llevado a quedarse con solo dos agentes en el municipio.

No obstante, Cruz ha apuntado que para el próximo año se convocarán las plazas con el fin de incrementar el número de agentes. Mientras tanto, la presencia de la Guardia Civil es constante y el número de temporeros extranjeros que circulan por las calles comienza a descender ya que desde el Ayuntamiento también se han facilitado billetes gratuitos de autobús para todas las personas que han querido desplazarse a otros puntos de la provincia para seguir buscando trabajo.