Eran las cinco de la madrugada del pasado domingo, cuando, según relata la Policía Nacional, unos clientes del pub, al terminar sus consumiciones, abandonaron el local para dirigirse al vehículo de uno de ellos, que estaba cerca. En ese momento, el dueño del local, ahora detenido, salió detrás de ellos recriminándoles que no habían abonado las consumiciones.

Así, se dirigió a una de las mujeres del grupo, que manifestó que pese a estar "bastante ebrios", sí habían pagado el total de lo consumido.

El propietario, "no conforme", entró en el local y cogió dos botellas de cristal, con las que se dirigió a los denunciantes y rompió una de ellas en la cabeza del varón, vecino de la ciudad de mediana edad, quien cayó desplomado al suelo y tuvo que ser atendido en el lugar por servicios médicos. Fue trasladado al Hula y posteriormente derivado al hospital de A Coruña.

A DISPOSICIÓN JUDICIAL

Fruto del golpe, el hombre ha tenido que ser intervenido del ojo, y está a la espera de realizar nuevas pruebas médicas, para determinar el alcance final de las lesiones.

Una vez en el suelo, después del impacto, el agresor continuaba golpeándole "de no ser la intervención de los transeúntes y la inmediata llegada de las dotaciones policiales del servicio de radiopatrullas de la comisaría", según la policía.

"El ahora detenido continuó con una actitud despectiva hacia los allí presentes, de lo que se deja constancia en dependencias policiales", añade. Este jueves fue localizado, detenido y puesto a disposición judicial.