El de hoy no será un inicio de curso cualquiera. Al mismo tiempo que centenares de granadinos se incorporan a sus puestos de trabajo, los peones de las obras del metro ultiman la señalización y los preparativos de los trabajos.

Desde hace una semana, los desvíos por las obras del metropolitano en el Camino de Ronda y el Zaidín son una realidad que pillará a más de uno despistado. De hecho, el cambio de direcciones ya ha provocado alguna que otra confusión, pese a estar ya instalados los paneles y señales informativas.

Es el caso, por ejemplo, de Arabial, que ha pasado a ser de doble sentido al quedar cortado el Camino de Ronda desde Marqués de la Ensenada hasta el río. Para volver a la Redonda basta con enlazar Arabial con el puente que desemboca en la calle Los Juncos.

Las mayores dificultades para la fluidez del tráfico pueden darse los primeros días en las intersecciones de la avenida de América con Cádiz y Dílar, especialmente afectadas por los trabajos del tramo del metro que discurre entre el río Genil y el Campus Tecnológico de la Salud.

Pese a la señalización, algunos conductores han tenido problemas para coger la avenida de Dílar desde la calle Don Bosco, ya que conviven las señales antiguas con los avisos de las obras -en amarillo-. No obstante, el Ayuntamiento insiste en que se reforzará la presencia policial en las calles afectadas por los trabajos para facilitar el tránsito de los vehículos.

Mientras, sólo los residentes y el transporte público podrán pasar por un carril paralelo a los tramos en obras. La circulación por la Ronda Sur ha vuelto a la normalidad al culminar los trabajos del paso inferior del metro que atraviesa la Circunvalación y que obligaron a desviar el tráfico a principios de verano.

En el centro, los operarios ultiman la reforma de las calles adyacentes a Bib-Rambla -apenas quedan varias por rematar- iniciadas por Urbanismo en plena época de rebajas y que tantas quejas suscitó entre los comerciantes y empresarios de la zona.

Calles levantadas y proyectos

Las máquinas del metro no son las únicas que verán estos días quienes regresan de sus vacaciones. En el Cerrillo de Maracena continúa la reforma de la avenida, que contará con aceras y farolas.

Allí recuerdan que aún queda por asfaltar la barriada de San Juan. En San Pedro (Albaicín) tienen una decena de calles empantanadas por el adecentamiento del empedrado y las calzadas.