La reurbanización y peatonalización de plazas avanza en València, y lo hace como una herramienta más para combatir el cambio climático en una dinámica de ida y vuelta: con la generación de menos emisiones al eliminar la circulación de vehículos, y con más salud ambiental al proliferar los árboles y las zonas de socialización para las personas.

Según los datos hechos públicos por el área de Desarrollo Urbano Sostenible, actualmente se han reformado ya 10 plazas en diferentes barrios de la ciudad, otros dos proyectos están en fase de ejecución y cinco están a la espera de ser iniciados, en diferentes fases de redacción o aprobación.

El proyecto València, ciudad de plazas fue iniciado el mandato anterior y se ha configurado ya no solo como uno de los puntos del Govern del Rialto que comparten Compromís y PSPV en el Ayuntamiento, sino también como parte del Plan Verde y de la Biodiversidad presentado la semana pasada y que busca renaturalizar la ciudad y enfocar su crecimiento hacia un modelo sostenible.

La vicealcaldesa y concejala de Desarrollo Urbano, Sandra Gómez, reivindica este modelo como herramienta para luchar contra el cambio climático desde las ciudades. "El principal objetivo ha sido estudiar la ciudad, barrio a barrio, con el fin de recuperar espacios vitales para la mejora de la calidad de vida de la ciudadanía y sumarnos a los objetivos de desarrollo sostenible", explica.

Gómez indica que desde la gestión urbanística, València impulsa "la recuperación de las plazas como espacios donde poder construir lazos comunitarios estables y sostenibles". 

En esta línea, afirma que se trata de espacios "donde crecer, compartir, jugar, divertirse y aprender a convivir". Antes de las intervenciones, estas plazas "funcionaban como congestionados parkings de cemento y hormigón donde las aceras apenas ocupaban un espacio residual", añade, para señalar que las necesidades "más urgentes se encontraron en los barrios".

En cuanto a las plazas ya remodeladas, la del Mercado de Rojas Clemente, en el barrio del Botànic, fue una de las primeras en ser peatonalizadas. Actualmente, cuenta con arbolado, zonas de estancia, juegos para los más pequeños y aparcamiento de bicicletas para fomentar el uso de las mismas.

El barrio del Cabanyal era uno de los que necesitaba una "urgente intervención" y hasta el momento se ha actuado en las plazas del Rosario y Lorenzo La Flor. Una de las últimas reurbanizaciones de la ciudad se ha producido en la plaza de San Sebastián (Botànic). También se ha intervenido en San Jerónimo (Rascanya), Río Segura (Forn d’Alcedo), San Felipe Neri (Algirós) y Arzobispo Olaechea (San Marcelino).

Respecto a los planes de futuro, se encuentran en proceso de ejecución la plaza Grup Marqués de Vallterra en El Perellonet y la plaza Ceramista Gimeno, en Malilla, donde se encuentra el colegio público Rafael Mateu Cámara. 

Entre los proyectos pendientes, destacan los grandes enclaves del centro de la ciudad, como la futura peatonalización de la plaza de San Agustín y la urbanización de algunas tan icónicas como la de Ciudad de Brujas y el entorno de la Lonja y el Mercat Central. 

Todo ello sin olvidar la total reurbanización de las plazas de la Reina (cuyo proyecto depende del área de Movilidad y está pendiente de salir a licitación tras su aprobación en Junta de Gobierno) y del Ayuntamiento, ambas emblemas de la ciudad.