Así lo ha indicado la delegada a la puerta del Centro de Gestión de Tráfico de Valladolid, donde se ha guardado un minuto de silencio con motivo del Día Mundial en Recuerdo a las Víctimas de Accidentes de Tráfico y se ha leído un manifiesto en el que se ha puesto de relieve que "las muertes y heridas por accidente de tráfico constituyen eventos violentos y traumáticos cuyo impacto tiene efectos, a menudo, permanentes".

Junto a Martín, han asistido al acto, todos ellos luciendo un lazo naranja, la coordinadora regional de la Dirección General de Tráfico, Inmaculada Matías; el concejal de Movilidad y Espacio Urbano, Luis Vélez o el delegado territorial de la Junta en Valladolid, Augusto Cobos, entre otras autoridades.

En este homenaje "sencillo pero emotivo", Martín ha lamentado que los accidentes de tráfico se hayan convertido en "un tributo durísimo y cruel que, a veces, parece que se asume con naturalidad y resignación". No obstante, "eso no puede ni debe ser así porque puede evitarse", ha incidido.

"Las cifras son demoledoras", ha señalado la delegada, ya que cada año mueren en el mundo 1.300.000 personas en las carreteras. En España, en 2018 murieron 1.806 personas. En Castilla y León, fueron 176 las que perdieron la vida el año pasado, 23 de ellas en Valladolid.

Además, durante el año 2018 en España se notificaron 102.299 accidentes con víctimas, con 1.806 fallecidos, 8.935 heridos hospitalizados y 129.674 heridos no hospitalizadas. En Castilla y León, en los cinco últimos años (2014-2018), se notificaron 21.584 accidentes con víctimas, con 853 fallecidos, 3.392 heridos hospitalizados y 26.701 heridos no hospitalizados.

En este sentido, también ha recordado que los usuarios vulnerables -peatones y ciclistas, entre otros- representan la mitad de todos los fallecidos por accidente de tráfico a nivel mundial.

"Está claro que el coche es una máquina peligrosa cuando no se ponen los cinco sentidos en la conducción", ha aseverado la delegada antes de hacer un llamamiento a la "prudencia y responsabilidad" de los conductores. "El consumo de alcohol, sustancias tóxicas, las distracciones o el exceso de velocidad son imprudencias e irresponsabilidades que causan víctimas y dolor", ha recordado.

AGENDA 2030

La Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible ha fijado una meta ambiciosa con respecto a la seguridad vial, consistente en reducir a la mitad, para 2030, el número de defunciones y lesiones por accidentes de tránsito en todo el mundo. Y es que, si no se aplican firmes medidas para evitarlo, se prevé que para 2030 los accidentes de tránsito serán la séptima causa de defunción en el mundo.

En el año 2018, España ocupó la séptima posición en el ranking de tasas de víctimas mortales con un valor de 39 fallecidos por millón de habitantes, por debajo de la tasa europea que fue de 49 fallecidos por millón de habitantes.

DÍA MUNDIAL

El Día Mundial en Recuerdo a las víctimas de Accidente de Tráfico tiene por objeto sensibilizar a la población general sobre un hecho cotidiano que produce inmenso dolor y sufrimiento a millones de personas en todo el mundo: los accidentes de tráfico.

El Día en Memoria de las Víctimas de Tráfico se inició en 1993 en el Reino Unido por Brigitte Chaundry, de la asociación Road Peace, y rápidamente se extendió a otras organizaciones de víctimas de accidentes de tráfico bajo el auspicio de la Federación Europea de Víctimas de la Carretera (FEVR).

Naciones Unidas, en la sesión plenaria del 26 de octubre de 2005, declaró el tercer domingo de noviembre de cada año el Día Mundial en Memoria de las Victimas de Accidentes de Tráfico. Desde entonces, el número de países que se suman a la celebración del Día Mundial crece cada año.

Este año, el lema de la jornada ha girado en torno a uno de los pilares del Plan Global para la Década de Acción para la Seguridad Vial, que se refiere a circular con vehículos más seguros.