Las vías con más accidentes urbanos de tráfico en España son la M-40 a la altura de los Túneles de El Pardo y de las salidas de Mercamadrid (Madrid), la avenida Diagonal en las proximidades del Camp Nou (Barcelona) y el paseo de la Castellana (Madrid).

Así se desprende del estudio 'Puntos rojos: los accidentes de tráfico en las capitales españolas', elaborado por la Fundación Línea Directa a partir del análisis de casi 500.000 siniestros viales registrados por la Dirección General de Tráfico (DGT) entre 2013 y 2017.

Se trata de la segunda edición de este trabajo, después de que la fundación de esa entidad aseguradora publicara el primero en 2012 con datos entre 2006 y 2011. Entonces, las dos vías con más accidentes urbanos eran también la M-40 y la avenida Diagonal.

El director general de la Fundación Línea Directa, Francisco Valencia, presentó el nuevo estudio este lunes en una rueda de prensa en Madrid y explicó que se han identificado como 'puntos rojos' las vías urbanas (incluyendo calles y circunvalaciones) en las que se han concentrado más accidentes graves en los dos últimos años, registrados mediante la geolocalización de los servicios de asistencia en viaje de la compañía.

'Top ten'

Las tres vías más peligrosas para el tráfico en las capitales españolas y sus proximidades son la M-40 cerca de los Túneles de El Pardo y las salidas de Mercamadrid (19 AB sentido sur y 20 sentido norte), la avenida Diagonal en el tramo comprendido entre Doctor Marañón y la Plaça de Pius XII (zona del Camp Nou y de varias facultades universitarias), y el eje Recoletos-Castellana en el entorno de Cibeles, Nuevos Ministerios y el Santiago Bernabéu, en Madrid.

El 'top ten' lo completan la calle Alcalá en el puente de Ventas y entre el número 600 y el 700 (Madrid), la M-30 en el nudo sur y el nudo de Manoteras (Madrid), la avenida Denia en la salida del túnel y a la altura del número 75 (Alicante), la SE-30 en el Puente del V Centenario (Sevilla), la avenida del Cid en el entorno del número 150 (Valencia), la avenida Alcalde Alfonso Molina en la zona del Coliseum (A Coruña) y la avenida Torneo junto al puente de la Barqueta (Sevilla).

El accidente tipo en una vía urbana se debe a un alcance trasero de un vehículo a otro o a un impacto lateral en un cruce o una rotonda, generalmente por distracciones y por no respetar la distancia de seguridad o la prioridad en la vía.

Las zonas más dañadas de los vehículos son el parachoques y las aletas, y el coste medio de reparación se sitúa en unos 1.200 euros Las principales lesiones personales son los esguinces cervicales (65% de los casos), las hernias discales (15%) y los esquinces de rodilla (10%).

Evolución

Por otro lado, Valencia destacó que la siniestralidad urbana entre 2013 y 2017 prácticamente dobló a la registrada en carretera. En 2013 hubo 52.222 accidentes con víctimas en las vías urbanas, por 37.297 en las carreteras, cifras que aumentaron a 64.740 y 37.493 en 2017, respectivamente. Por tanto, los siniestros en las ciudades subieron un 23,9%, mientras que los interurbanos apenas crecieron un 0,5%.

La mortalidad vial en las ciudades se incrementó un 13% durante ese lustro (7,3% en las carreteras), periodo en el que murieron 2.360 personas en accidentes urbanos. La cifra de heridos graves bajó un 2,5% (-8% en las vías interurbanas) y subió un 22% la de heridos leves (+2% en las carreteras).

Por último, Valencia comentó que la Fundación Línea Directa ha creado una plataforma de denuncia para que los ciudadanos puedan informar de las vías urbanas más peligrosas por su trazado, visibilidad o estado de conservación.

Para ello, pueden introducir la dirección en 'www.fundacionlineadirecta.org/puntos-rojos' tras geolocalizar el punto o identificar el código postal, lo que puede hacerse de forma anónima. Un equipo de expertos de esta entidad revisará cada punto e informará a las administraciones pertinentes.