Nueva York prohibe la venta de foie gras en sus tiendas y restaurantes

El foie gras se elabora alimentando forzosamente a gansos y patos hasta provocar que su hígado se hipertrofie y crezca 10 veces más que su tamaño normal.
El foie gras se elabora alimentando forzosamente a gansos y patos hasta provocar que su hígado se hipertrofie y crezca 10 veces más que su tamaño normal.
Éthique & Animaux L214 / WIKIMEDIA COMMONS
El foie gras se elabora alimentando forzosamente a gansos y patos hasta provocar que su hígado se hipertrofie y crezca 10 veces más que su tamaño normal.

El foie gras tiene los días contados en Nueva York, después de que las autoridades de la ciudad hayan acordado prohibir su venta a partir de 2022 por considerar que las técnicas usadas para su producción son crueles con las aves.

La Gran Manzana, una de las grandes capitales gastronómicas de Estados Unidos, se sumará así al estado de California, donde el lujoso producto de origen francés ya está vetado.

El Consejo municipal neoyorquino ha aprobado la medida con una amplia mayoría en una votación celebrada este miércoles, por lo que queda únicamente pendiente de la firma del alcalde, Bill de Blasio, cuya oficina ya ha anunciado que la ratificará. 

La medida no sólo afectará a las importaciones, sino también a compañías estadounidenses que fabrican el producto, incluídas varias en es estado de Nueva York, para quienes la Gran Manzana es su principal mercado.

Por ello, para dar tiempo para que se adapten, el veto no entrará en vigor hasta 2022.

La nueva norma, que es parte de un amplio parte de medidas para combatir la crueldad con los animales, incluye multas de hasta 2.000 dólares (casi 1.800 euros) para quien la viole.

No se descarta que, una vez aprobada por el alcalde, la industria inicie una batalla legal contra la prohibición, algo que ya hizo en California, aunque sin éxito, ya que los jueces han desestimado hasta ahora los argumentos.

Muchos países prohíben la alimentación forzada

Carlina Rivera, la concejala impulsora de la legislación, defiende que va en contra del "proceso más inhumano" de la industria alimentaria.

Para incrementar el tamaño del hígado (hasta diez veces) se obliga a los animales a ingerir, mediante un tubo o embudo, grandes cantidades de alimentos grasos, principalmente granos de maíz hervidos con grasa.

Esta técnica produce la hipertrofia del hígado de los animales empleados (aves acuáticas migratorias, principalmente gansos y patos, ya que su hígado almacena grasa de manera natural para la migración).

Los críticos con este producto argumentan que el proceso genera un gran sufrimiento a estos animales y supone prácticamente una forma de tortura.

De hecho, la prohibición sobre este producto no es exclusiva de los dos territorios de Estados Unidos.  Entre otros, Alemania, Argentina, Austria, Dinamarca, Finlandia, La India, Irlanda, Israel, Italia. Noruega, Reino Unido, Suecia, Suiza y Turquía han vetado la alimentación forzada (y con ello el Foie Gras).

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