El resultado del barómetro pre-electoral del CIS ha provocado críticas en los dos partidos de la oposición de centro-derecha. El presidente del PP, Pablo Casado, ha dicho que "se inventan el CIS". 

"Estamos a tiro de piedra. Se habla de empate técnico, amenazan en Cataluña a los que provocan de las revueltas sin hacer nada. Ganan tiempo, pero se lo roban a todos los españoles y estas ocurrencias tienen un coste electoral", ha añadido.

El CIS pronostica una subida de hasta 27 escaños al PSOE y el desplome de Cs en un sondeo previo a la sentencia del 1-O

Según sus palabras, "por eso ahora" al PSOE "le dan las encuestas una gran bajada, 10 puntos, ninguna le da mejor resultado que en abril. Con 123 escaños pretendía gobernar como si tuviera mayoría absoluta. Llegarían a 160, decían los ministros, pero los españoles no son bobos".

El presidente de Ciudadanos (Cs), Albert Rivera, por su parte, ha afirmado que la encuesta del CIS publicada este martes será la "última" que haga "un militante del PSOE" si la formación naranja llega al Gobierno y ha prometido hacer un "concurso público" para colocar al frente de la institución a un "profesional".

Rivera, como ya ha hecho en otras ocasiones, se ha negado a valorar una encuesta que, a su juicio, no es "fiable" porque, según sus palabras, se ha realizado en la "sede del Partido Socialista".

"Me parece que ya está bien de colocar a la gente en la tele pública, de colocar en el CIS y de nombrar a jueces a dedo. Creo que España necesita renovar el panorama político", ha comentado en una estación de servicio en la N-II donde se ha reunido con transportistas.

Si llega al Gobierno, el líder de Cs se ha comprometido a convocar un concurso público para que las encuestas del CIS no las dirija ningún partido político, sino un "profesional como la copa de un pino".