En declaraciones a los medios, el alcalde de Teruel destacó que "con esto vamos a dar otro impulso turístico a la ciudad de Teruel, en una zona emblemática como es la conducción de agua medieval", de modo que así se añade "otro atractivo turístico a la visita a la ciudad de Teruel", afirmó Ferrer, que acompañado del consejero delegado de Urban, Luis Muñoz, visitó hoy las obras.

El primer edil explicó que la primera fase sirvió para actuar en el Acueducto de Los Arcos y en la plaza Monsén Peras. Ahora se está llevando a cabo la segunda fase, de la torre hasta el Portal de la Traición, y todavía queda pendiente una tercera fase, en la Torre de la Lombardera.

Tercera fase

Esta tercera fase será "más complicada", anunció el alcalde, puesto que "hay un propietario particular que tiene parte de la muralla. Hasta que eso no se resuelva no podemos continuar con la restauración de la Muralla". Además, Ferrer señaló que la Comisión de Patrimonio "quiere actuar en dos partes: el puente de la traída del agua, cerca de la Fuente del Macho; y la otra detrás del garaje del Ayuntamiento, desde donde se ve el Torreón".

Una vez terminada la obra, la Muralla tendrá una altura de 12 metros y otros 2,5 metros subterráneos que tiene la muralla original y que están pendientes de restauración. Precisamente la nueva altura de la Muralla ha traído consigo las críticas de los vecinos del edificio posterior, cuyas ventanas quedarán tapadas.

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