Un ciudadano alertó el pasado domingo a la Policía Local de la presencia de un caballo herido dentro de un remolque estacionado junto a las pistas de automodelismo de la playa de Samil. El animal tenía una herida en el morro, por los roces contra los barrotes del remolque y en el interior del mismo "se apreciaban abundantes restos de sangre", según la Policía.

Bebió 15 litros de agua

No tenía agua ni comida. Por eso, la patrulla suministró agua con calderos desde el exterior del vehículo. Llegó a beber 15 litros.

Después de atender al caballo los agentes localizaron a su dueño. En la lona del remolque estaba impresa la leyenda "venta de caballos" junto a un número de teléfono al que llamaron y localizaron al propietario del animal.

A su llegada, casi una hora después del aviso, los agentes le informaron de que estaba denunciado al departamento de Medio Ambiente del Concello por abandonar a su caballo en un lugar cerrado, causar sufrimiento y mantenerlo en condiciones degradantes.

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