Los altos niveles de polución presentes en el aire de los 57 municipios del área metropolitana de Barcelona, muy por encima de los máximos que marca la Organización Mundial de la Salud (OMS), provocan cada año 3.500 muertes, según el último estudio del Centro de Investigación en Epidemiología Ambiental (CREAL). Si estos niveles se redujeran hasta el umbral recomendado, la esperanza de vida de los barceloneses aumentaría en 14 meses. De igual modo, se reducirían en 1.800 los ingresos hospitalarios anuales por causas cardiorrespiratorias.

Para tratar estos aspectos fundamentales para la buena salud de la metrópolis Barcelona y encontrar soluciones a corto plazo, este jueves y el próximo viernes se celebra en la ciudad de Sabadell el primer Congrès de l'Aire.

Fira Sabadell acogerá durante estos dos días a 95 ponentes de prestigio científico nacional e internacional que participarán en 22 sesiones de trabajo. Desde el CSIC-IDAEA (Institute of Environmental Assessment and Water Research) e ISGLOBAL, los expertos Xavier Querol y Jordi Sunyer trazarán una radiografía del impacto en la salud y en la calidad de vida de los barceloneses la implantación de medidas de contención de la polución.

Conscientes de que en la conurbación de Barcelona se han superado ampliamente los niveles de óxidos de nitrógeno (NOx) y de partículas de un diámetro inferior a los 10 micras (PM10), la Generalitat, la Diputació de Barcelona y el Área Metropolitana de Barcelona (AMB) darán a conocer en estas jornadas varias campañas anticontaminación.

El Departament de Territori i Sostenibilitat estudia en estos momentos medidas como la ampliación de la Zona de Bajas Emisiones Rondes de Barcelona impulsada por el AMB, que se implantará a partir del próximo 1 de enero de 2020 en el ámbito comprendido entre las rondas de Dalt y Litoral, a las principales ciudades catalanas. También está trabajando en un nuevo modelo de gestión de los peajes de autopista en el que el propietario de los vehículos que más contaminen sean los que más paguen.

Con esta medida dejarán de circular por el área metropolitana unos 115.000 vehículos, entre el 14% y el 16% del parque actual y se espera reducir en un 15% las emisiones de PM10.

En esta tarea es de vital importancia los más de 35 millones de datos anuales que recoge la Generalitat a través de los 137 puntos de medición automática del aire repartidos por toda Cataluña.