Además de mostrar su oposición, los tres grupos políticos manifestaron que el Ayuntamiento de Murcia se personará en todos los procedimientos y expedientes administrativos que supongan una agresión al territorio municipal, tanto desde el punto de vista territorial como ambiental.

En este caso concreto, se opondrán jurídica y políticamente a la intención de ubicar el vertedero en el paraje mencionado, por las razones que aconsejaron a los técnicos del consorcio a excluir este paraje, así como cualquier otra ubicación que ponga en peligro los intereses de los habitantes de Murcia y los valores medioambientales del municipio.

El Pleno del Ayuntamiento de Murcia, a través de su alcalde-presidente, intensificará los contactos institucionales con todos los órganos administrativos encargados de gestionar la instalación y gestión del macrovertedero.

Especialmente, recabará el apoyo de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia, la Generalitat Valenciana, el Consorcio de la Vega Baja, la Diputación de Alicante, la Confederación Hidrográfica del Segura y del Ministerio de Medio Ambiente, Rural y Marino, al objeto de salvaguardar los valores medioambientales y la salud de los vecinos de la zona.

También el Consistorio murciano se ofrece como anfitrión para celebrar una reunión interterritorial con todas las partes implicadas, con el fin de dar solución a un problema creado por una decisión errónea.