El Parlamento Europeo tratará en su sesión prevista para mañana y pasado el depósito por parte de Fertiberia de fosfoyesos en las marismas de Mendaña, en Huelva, tras la sentencia emitida por la Audiencia Nacional que considera caducada la licencia para esta actividad, así como las presuntas fugas del isótopo radiactivo cesio-137 al río Tinto procedentes de las cenizas de Acerinox.

El eurodiputado de Los Verdes, David Hammerstein, ya aseguró en las jornadas 'De fosfoyesos al cielo, cómo limpiar el Polo Químico y no morir en el intento', celebradas en mayo en la capital, que la "mejor" noticia "sería tener un calendario claro" para el cese de estos vertidos "y no los plazos que hablan de cinco o siete años", pues "es una obviedad que esta actividad se encuentra fuera de la legalidad tanto por la Unión Europea como por los tribunales".

Hammerstein aseveró que "no se trata de ser fundamentalistas ecológicos, ya que únicamente se está hablando de que se apliquen las directivas europeas y las leyes", aseverando que "lo que pone en peligro el futuro de Huelva es esa defensa de una industria antigua y obsoleta que ya se ha terminado", por lo que "cuanto antes se acepte la realidad legal, mejor".

Acerinox y el río Tinto

El Parlamento Europeo tendrá en cuenta otra denuncia, presentada en nombre del Proyecto Inter/Sur para la Ecociudadanía, sobre la contaminación del río Tinto y la presunta ineficacia de las autoridades ambientales andaluzas para gestionar las cenizas de Acerinox.

Y es que organizaciones como Greenpeace vienen anunciando la supuesta existencia de fugas del isótopo radiactivo cesio-137 al río Tinto procedentes de las más de 7.000 toneladas de material contaminado radiactivamente por el accidente de Acerinox en Cádiz de 1998.

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