La Iglesia de Santa Ana lucirá como nueva gracias a ellos. Tienen sólo de 15 a 25 años, pero sobre sus manos ha caído una tarea de peso: restaurar el gran templo trianero.

Son los alumnos de la escuela-taller Alfonso X El Sabio, que gracias al convenio entre la Junta , el SAE y el Fondo Social Europeo, trabajan desde hace cinco años en la recuperación de la iglesia.

Al mismo tiempo que aprenden un oficio (albañilería y carpintería), reciben clases de orientación y prevención laboral, de informática, de primeros auxilios…

«La mayoría son chicos que no quieren estudiar, y ésta es una forma de formarlos. Algunos vienen con problemas familiares o de integración», cuenta Juan Atalao, responsable del módulo de albañilería.

Las obras están ya muy avanzadas y estos 30 chavales serán la última promoción de alumnos que trabajen en ellas, hasta febrero del año que viene.

Tres promociones de jóvenes obreros han participado en la rehabilitación del archivo de Santa Ana, la Casa del Coadjutor, la sacristía, el museo de la Iglesia, los muebles, el órgano…

Entre todos reparan el lucido, la pintura, los estucos y los revestimientos. «Los canceles (puertas) estaban infames, ni se veían los dibujos. El órgano llevaba años sin tocarse. Lo hemos limpiado y abrillantado con barnices a la antigua usanza», comenta Juan.

Ahora están restaurando el patio externo a los salones parroquiales y la Capilla de las Ánimas, cuyos azulejos reparan los chicos de la escuela-taller de cerámica de Gelves.

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