"No dejen morir a nuestros compañeros", con estas palabras los 23 inmigrantes rescatados ayer de una patera, que volcó en las costas de Motril (Granada), suplicaban ayuda.

El símbolo de esta tragedia es K. L., que a sus 28 años, ha visto cómo a su mujer y su hijo, de 3 años, se los tragaba una ola. Este nigeriano ha relatado a la Policía que ambos estaban frente a él cuando un golpe fuerte de mar los volcó. "Este fue el último momento en que conseguí verlos. Los busqué rápidamente, pero no puede verlos más por la oscuridad y por el oleaje que había".

Un grupo de psicólogos de la Cruz Roja está prestando atención a algunos de los 23 inmigrantes nigerianos, que vieron como 14 compatriotas que viajaban con ellos en una patera que se hundió frente a la costa de Motril (Granada) no pudieron ser rescatados.

Cuando fueron rescatados por miembros de Salvamento Marítimo y del Servicio Marítimo de la Guardia Civil , estas personas estaban aterrorizadas por lo que algunos de ellos necesitarán ayuda psicológica para superarlo.

Salvamento Marítimo ha reanudado hoy la búsqueda de los 14 inmigrantes desaparecidos ayer frente a las costas de Motril, operación en la que se han sumado medios aéreos.

El estado de la mar ha mejorado notablemente según ha señalado Salvamento Marítimo, que ha añadido que "seguramente" continuarán durante todo el día con la búsqueda de las personas desaparecidas.

Sin embargo, no mantienen la esperanza de encontrar con vida al menor, las cuatro mujeres y los nueve hombres que, según sus compañeros de travesía rescatados, viajaban con ellos en la embarcación.

Viento de 70 kilómetros por hora

La lancha volcó con un viento de 35 nudos -más de 70 kilómetros por hora- y unas olas de cuatro a cinco metros, instantes antes de que llegaran los dispositivos de Salvamento Marítimo y el Servicio Marítimo de la Guardia Civil, quienes presenciaron el suceso, tiraron los chalecos a la mar y rescataron a las personas que pudieron localizar.

Los 23 inmigrantes rescatados salieron de Marruecos el sábado pasado y llegaron sobre las 5.30 horas del lunes al puerto de Motril, donde recibieron una primera asistencia humanitaria.

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