¿Cuál es el primer recuerdo que tiene de Madrid?

Cuando fui con mi madre a la boda de un primo, en un 600 de la época. Yo tendría unos ocho o nueve años. Íbamos en el coche mis dos tíos, mi madre y tres hermanos.

La mejor banda sonora para disfrutar de la ciudad es...

Tiene muchas. Yo le pondría una muy abierta, con mucho mestizaje y muy sincera. Astor Piazolla le puso la banda sonora a Buenos Aires y, en concepto, esa misma música podría ser también la banda sonora de Madrid.

Cuando cierra los ojos y piensa en la capital, ve...

Muchos amigos.

¿Qué época del año le sienta mejor a la ciudad?

Para nosotros, que somos del norte, la mejor es la más fresquita. Esos inviernos con el cielo azul y secos.

¿A qué huele Madrid?

A algo rico, rico, como diría Karlos Arguiñano. A una purrusalda calentita.

¿A qué sabe?

A productos ricos de la tierra.

Una excursión que todo el mundo debería hacer...

Lo mejor es perderse entre calles y mirar a la gente. E ir a museos, teatros, conciertos...

Pero más vale no dejarse caer por...

No le cerraría las puertas a ningún sitio.

Ama Madrid...

Siempre me ha gustado Madrid. En Madrid hay muchos vascos y siempre hablan bien de ella. Quizá cuando más la ame sea durante los conciertos, que es cuando la sensibilidad está más a flor de piel.

Pero le desquicia...

Cuando hace muchísimo calor y el asfalto se te pega a los zapatos.

¿Cuál fue su último viaje en metro?

Hace muchísimo, un año o así. Viajo más en coche o en taxi, por la superficie.

Tómese un desayuno castizo: ¿con churros o porras?

Con los dos, que soy de Bilbao.

Súbase al carro de los tópicos: ¿cómo son los madrileños?

Gente sencilla, cercana y divertida.

Una película ambientada en Madrid.

El día de la bestia, de Álex de la Iglesia.

Un libro ambientado en Madrid.

Alguno de Cela o de Manu Leguineche.

¿En qué lugar de la comunidad le gustaría que esparcieran sus cenizas?

Ésa es una pregunta difícil para uno de Bilbao... Pues en el Museo del Prado, para estar bien acompañado.