La empresa Geaser, adjudicataria del servicio de recogida de basuras en

Torrelavega, ha dado por rotas las negociaciones con los representantes de los trabajadores, al no poder asumir, según explicó, el incremento del "cien por cien" de los sueldos que éstos reclaman.

La empresa explicó que a lo largo de ocho horas, entre ayer y hoy, ambas partes han mantenido reuniones con un resultado "

decepcionante", al constatarse, según dice, que "no existe voluntad negociadora" por parte de los sindicatos.

Señala al respecto que después de ofrecer subidas salariales "importantes", la respuesta de los representantes sindicales ha sido "negativa" y "automáticamente" han reivindicado una subida "

del cien por cien" de los salarios en vigor, propuesta que "no puede ser asumida" por la empresa, tanto por su "inviabilidad", como por su repercusión en las arcas del Ayuntamiento de Torrelavega.

Indica que la empresa ha puesto sobre la mesa una "propuesta positiva de incrementos salariales", con una explicación "detallada" de lo que significan porcentualmente en los años de aplicación del acuerdo que propone, y ha instado, "incluso", a continuar con nuevas reuniones mañana viernes, alternativa que también "ha sido rechazada", debido, a su juicio, a la celebración de un Pleno municipal en el que "una vez más, se intenta meter ruido y ejercer nuevas presiones".

Para Geaser, en un contexto en el que las instituciones están tomando medidas para limitar las subidas salariales

"estrictamente" al crecimiento del IPC, o se están congelando las ofertas de empleo público, se debe actuar con el "

realismo" que, en su opinión, se demuestra en su propuesta de subidas salariales "muy significativas", pero "con sujeción lógica" a estos criterios, ya que de otra manera redundarían en el inmediato futuro en un incremento "muy sustancial" de los gastos corrientes del municipio del que depende el servicio.

Por último, la empresa señala que ayer por la noche "

los llamados piquetes informativos" pincharon cinco ruedas de los camiones que realizaban los servicios mínimos, "tratando de impedir el cumplimiento de la legalidad".

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