En un comunicado, estas organizaciones pidieron a Bob Dylan y a Amaral, protagonistas del cartel del concierto del próximo 28 de junio, que "no se dejen manipular" por una Consejería "que está amparando proyectos que ponen en claro riesgo el patrimonio natural y cultural de la Comunidad".

A su juicio, el concierto de Bob Dylan y Amaral en la finca Mesegosillo de Hoyos del Espino, en el límite del Parque Regional de Gredos, se enmarca en los "continuos desmanes medioambientales" protagonizados por la Consejería de Medio Ambiente que encabeza María Jesús Ruiz, "quien está demostrando mayor apego por los intereses de su partido y de los depredadores del medio ambiente que por defender el medio ambiente y el interés general de los ciudadanos y de las generaciones venideras".

En este sentido, las organizaciones firmantes señalaron que han sido "varias" las ocasiones "en la que las políticas de María Jesús Ruiz han quedado en entredicho", incluso en los tribunales de justicia, "que en algunos casos han evitado con sus dictámenes auténticas barbaridades medioambientales apadrinadas, cuando no promovidas, desde la propia Consejería de Medio Ambiente" como la estación de esquí proyectada en San Glorio; las sentencias contra la instalación de parques eólicos en espacios protegidos de la provincia de León y la sentencia contra la macrourbanización Ciudad del Golf de Las Navas del Marqués, entre otros.

En referencia al evento del sábado, las organizaciones recordaron que el concierto se ha programado en un Espacio Natural Protegido que aún carece del preceptivo Plan Rector de Uso y Gestión (PRUG) y demás planes establecidos en la aprobación del Parque Regional.

"Además, a pesar del impacto que produce en este espacio la infraestructura que lleva aparejada un concierto que espera reunir a más de 10.000 personas, no se ha sometido dicha actividad al procedimiento de evaluación ambiental a pesar de que un simple bar en esta zona requiere licencia ambiental y se le exige un estudio sobre los ruidos y vibraciones", resaltaron los firmantes, quien apuntaron a la Junta como "promotora y organizadora" de este tipo de conciertos "a pesar del serio perjuicio que produce en el medio ambiente, porque, entre otras razones, parece primar más en el Gobierno regional la rentabilidad económica que la protección del patrimonio natural".

"En comparación con los beneficios que algunos pueden obtener, dicha rentabilidad apenas tiene después incidencia en el necesario desarrollo de los municipios de la zona de influencia socioeconómica del Parque Regional, a los que la Junta abandona a su suerte y utiliza únicamente para promocionarse a costa del medio ambiente", afirman los firmantes de ese comunicado.

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