En un comunicado, la Federación Agroalimentaria de CC.OO aseguró que estas protestas contarían con el apoyo de países como Francia, donde la reestructuración deja sin empleo a 1.060 personas, y España, donde el recorte afecta a 830 trabajadores de una plantilla total de alrededor de 6.700 empleados.

Concretamente, Altadis reducirá 140 puestos de trabajo en funciones centrales y administrativas y 170 de los departamentos de marketing y ventas. Además, el cierre de la planta de Alicante, que cesa en la fabricación de cigarrillos negros, repercutirá en 338 empleos, mientras que el reajuste de tabaco en rama en Cádiz y Palazuelo (Cáceres), afecta a unos 258 trabajadores.

Según CC.OO, aunque Imperial Tobacco ha propuesto un plan de jubilaciones anticipadas, "esta medida resulta ineficaz en factorías como Alicante, donde la mayor parte de la plantilla no habrá cumplido los 55 años en 2009".

La reestructuración promovida por el grupo británico afectará en total a unos 2.440 trabajadores europeos de los más de 40.000 que la empresa tabaquera emplea en todo el mundo.