Los delitos contra el patrimonio histórico han cobrado una nueva dimensión en la provincia de Cádiz con la proliferación de empresas que se dedican abiertamente a expoliar la riqueza de sus fondos marinos.

Así, durante el ejercicio 2007 la Fiscalía de Cádiz abrió seis investigaciones por esta clase de delitos, dos en la sede de la Fiscalía de Cádiz y cuatro en la Fiscalía de área de Algeciras, y entre ellas cabe destacar las diligencias abiertas por expolio de yacimientos arqueológicos subacuáticos y apoderamiento de bienes del Patrimonio Historio contra los buques de la empresa norteamericana Odyssey Marine Exploration Inc.

Las diligencias abiertas por las Fiscalía para perseguir este tipo de delitos han ido en notable aumento en los últimos años: dos en 2005, cuatro en 2006, seis, como se ha dicho, en 2007.

La Fiscalía aprovecha todos estos datos y acontecimientos de todos conocidos para subrayar que la vigente normativa penal no acaba de ofrecer una regulación lo suficientemente eficaz como para responder a los perfiles que revisten las conductas más gravemente atentatorias contra el Patrimonio Histórico.

La dificultad, prosigue el Ministerio Público, de llevar a cabo la cuantificación de daños que en muchas ocasiones carecen de dimensión material aconsejaría que la tipificación de los ataques al patrimonio cultural se realizara al margen de la cuantía en que consistan éstos.

Por tanto, se señala como convenirte la tipificación de un específico delito de expolio de yacimientos, a la vista de los problemas que se plantean a la hora de tipificar conductas en este ámbito como constitutivas de hurto o apropiación indebida.

Se precisa una nueva normativa, según la Fiscalía gaditana, porque, sobre todo, el patrimonio subacuático, se encuentra sometido a una creciente amenaza como consecuencia de los progresos alcanzados en las técnicas de exploración.

Los yacimientos arqueológicos submarinos están siendo saqueados por cazadores de tesoros, con la consiguiente pérdida irremplazable de materiales de enorme valor para el estudio de la historia de las civilizaciones.

Es más, continúa el Ministerio Fiscal que se ha pasado de lo que anteriormente era la actuación de expoliadores ocasionales e individuos aislados a la actuación de grupos más o menos organizados o grandes y poderosísimas empresas dedicadas a actuaciones con finalidad únicamente lucrativa, como la anteriormente referida.

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