Las hipotecas y el Índice de Precios al Consumo (IPC) están ahogando a muchas economías familiares, que tienen que recurrir a todo tipo de recursos para obtener liquidez. Uno de ellos es el empeño de joyas y piedras preciosas, una actividad que ha experimentado un sensible incremento en Córdoba.

Fuentes de Cajasur , que gestiona el monte de piedad más importante de la provincia, informan a 20 minutos de que ha habido un aumento del 7% del número de esta clase de operaciones en lo que va de año.

Desde esta entidad financiera se resalta que «la actual situación económica tiene cierta repercusión» en este incremento. El proceso es sencillo. Es el dueño de la joya quien se acerca a las oficinas del monte de piedad, donde comprueban detalles del artículo, como el quilataje del oro o el diseño. Después se le ofrece una cifra de dinero que esa joya podría avalar y, si el cliente la acepta, se cierra el préstamo. El presidente de la Federación de Consumidores en Acción

Firmado el documento, hay un año para devolver el dinero y lograr de nuevo su objeto. Pasado ese plazo se procede a convocar una subasta para vender el producto. No obstante, fuentes de Cajasur recalcan que «la subasta sólo alcanza a una proporción muy pequeña».

Cada vez más extranjeros

El perfil de las personas que acuden a un monte de piedad para empeñar algún objeto de valor es claro.

Según fuentes de Cajasur, el 65% de los clientes son mujeres y un 40% tienen entre 36 y 50 años de edad. No obstante, se está percibiendo un incremento de los extranjeros, sobre todo latinoamericanos, que acuden a estos servicios. Los últimos datos hablan de un aumento del 12% en lo que va de año.

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