Más de 3.634 turistas en el mismo crucero. El Independence of the Seas atracó anoche en el Port de Barcelona por primera vez. Con 3.634 turistas a bordo, está considerado como el barco más grande del mundo, junto al Freedom of the Seas y el Liberty of the Seas. Tiene helipuerto, minigolf, nueve piscinas, casino, teatros, parque acuático, un ring de boxeo o un simulador de surf.

Por la mañana, el Port vivió el inicio de los trabajos de reflote de los cuatro yates afectados por el incendio de febrero. Una grúa con capacidad para levantar 250 toneladas de peso se encargará de las operaciones, que durarán unas cinco semanas. Ayer, según el Port, se extrajo el palo del Ladies First, que reposaba al lado de estribor del yate Glamur. Al final de todo, unos submarinistas limpiarán el fondo marino.