Llega el buen tiempo y con él, la necesidad social de lucir un buen tipo. Por eso, para la mayoría de las granadinas ha llegado el momento de ponerse a dieta. De las más de 200.000 mujeres de entre 15 y 44 años que hay en la provincia, el 70% (unas 140.000) están haciendo régimen de cara al verano. Según el doctor Ricardo Vílchez, jefe del Servicio de Endocrinología del Hospital Virgen de las Nieves, esta presión social afecta más a las mujeres que a los hombres.

Aunque el boom de los regímenes se da principalmente en estos meses, casi una de cada tres féminas tienen permarexia, un nuevo desorden alimenticio que consiste en estar siempre a dieta. «Estas personas no reciben control de profesionales, unas se informan a través de Internet, y otras en parafarmacias o por el boca a boca», asegura el doctor Vílchez.

Fuera dietas milagro

Pero para adelgazar no hay recetas maestras: se trata de cambiar los hábitos alimenticios y sociales de la persona. «Lo difícil no es perder peso, sino mantenerse», explica este endocrino. Así, el objetivo de cualquier dieta debe ser reducir la ingesta de calorías y fomentar el deporte para quemar las que tenemos acumuladas. No obstante, lo verdaderamente importante es adaptar la dieta a las características del enfermo.

Para el doctor Vílchez el problema de la obesidad se debe a un cambio en las formas de vida ya que, aunque nuestra genética va cambiando, no lo hace en tan poco tiempo y la obesidad se ha disparado en las dos últimas generaciones.

La preocupación de este profesional se centra en la obesidad infantil, ya que las unidades hospitalarias de endocrinología están empezando a ver a menores de 8 y 9 años con problemas de sobrepeso y obesidad y diabetes asociada. Para Vílchez, se trata de un problema de salud pública, ya que la mayoría no han llegado ni a la pubertad».

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