Ir cada día al trabajo supone para la mayoría de los españoles correr un riesgo psicosocial, principalmente, el de sufrir estrés, que afecta al 73% de los empleados, según un estudio del Observatorio de Riesgos Psicosociales de UGT.

Los autores del estudio, que analiza más de 4.000 puestos de trabajo de diversas áreas de actividad, apuntan a una mala organización del trabajo y un estilo de mando deficiente como principales responsables de esta situación.

De hecho, el informe revela que en el 75% de los casos las formas de los jefes son autoritarias y que el 43% de los trabajadores han sido víctimas de algún abuso por parte de sus superiores.

Factores desencadenantes

Los encuestados que afirman sufrir estrés laboral citaron, además de la actitud de sus jefes, otros factores que les llevan a esta situación: una carga mental alta; falta de autonomía en su puesto; indefinición de las tareas que debe desempeñar; realizar labores por debajo de su capacidad; inseguridad sobre sus condiciones laborales y el futuro; así como unas malas condiciones ambientales en su centro de trabajo.

De esta forma, la salud física y mental del 75% de los estresados terminan por empeorar. De hecho, el 71% reconocen sufrir el síndrome del «trabajador quemado» o burnout.

Síntomas frecuentes

Entre los síntomas frecuentes de esta quemazón están: sensación de cansancio y fatiga (39%); tensión e irratibilidad (31%); dolores de cabeza (30%); molestias en el cuello (29%); sensación de agobio (28%) y dificultades para conciliar el sueño (28%).

Al analizar los casos de los empleados que han estado de baja durante el último año o han sufrido acoso laboral, UGT ha descubierto que el 55% aseguraba haber tenido que soportar un trato vejatorio en forma de gritos. En el 38% de los casos el trabajador creía que su trabajo era evaluado de manera imparcial e injusta; el 35% tenía sobrecarga de tareas y el 31% creía que controlaban sus horarios y pausas de manera estricta. El 23% de los que estuvieron de baja por depresión aseguraba haber sufrido agresiones físicas y el 32% acoso moral.

La sensación de riesgo de acoso moral afecta al 26% de los consultados por trabajar en un ambiente «hostigador». Un 15% asegura que ha sido acosado puntualmente y un 2%, permanentemente.

Un problema estructural

En España «no se evalúan ni se hace prevención de los riesgos psicosociales del trabajo», asegura Dolores Duce, coordinadora del Observatorio de Riesgos Psicosociales de UGT.

Para cambiar la situación, recuerda Duce, habría que «cambiar toda la estructura empresarial» porque las consecuencias del problema (absentismo, desmotivación, bajas...) suponen un alto coste económico.

Aunque han aumentado las denuncias por acoso laboral, añade, «la gente aguanta hasta que surgen los problemas físicos y entonces estalla la situación».