Los alicantinos se aprietan y mucho el cinturón a tenor de los últimos datos que maneja el Banco de España aunque parece que no lo suficiente como para hacer frente a los grandes pagos que empresas y particulares han contraído con las entidades.

El importe de los préstamos concedidos a alicantinos ha crecido un 14,7% a finales de 2007 mientras que los ahorros que guardan bancos y cajas ha aumentado un 15,38%, según estos mismos datos.

Exactamente, 55.350 millones de euros frente a los 48.252 de 2006. Aunque también ahorran más, un 15,38%, esto es, 34.880 millones euros el año pasado frente a los 30.228 de 2006.

La subida del endeudamiento en Alicante es inferior a la de la media española, del 27%, y también en el ahorro la provincia está por debajo. En el conjunto del país las reservas de los españoles crecieron un 19%.

Según el Banco de España, el aumento de la deuda se debe a la escalada del euríbor que se aplica a las hipotecas y que está ya por encima del 5%. Es tal la situación que se está viviendo, que de hecho la Comunitat es la autonomía en la que se da el mayor número de cambios en las condiciones de sus hipotecas, por cada 100.000 habitantes, hasta 145, según el Instituto Nacional de Estadística.

Además, el capital prestado para este tipo de hipotecas en el tercer mes del año alcanzó los 1.084 millones de euros, 334.613 euros en Alicante. También se cancelaron registralmente 2.856 préstamos hipotecarios.

Las operaciones de compraventa de viviendas en la provincia de Alicante también han descendido un 43% a lo largo del primer trimestre del año: 2.463 transacciones de compra y venta de viviendas durante el pasado mes de marzo, frente a las 4.318 del mes de enero.

«Tengo tres trabajos»

Lucía tiene 26 años y trabaja literalmente de sol a sol para poder pagar su hipoteca. «Tengo tres trabajos porque me compré un piso y la letra de la hipoteca me sube a 1.000 euros». Trabaja en una tienda en horario comercial, esto es, de 10 a 14 y de 16 a 20 horas, pero no llega a 1.000 euros. A las siete se levanta y se va casa de una vecina, levanta a su hija, le da el desayuno, la lleva a la escuela y luego le recoge la casa. Y cuando sale de trabajar se va a casa de un anciano al que le da la cena y le acuesta.

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