Francia y España están estudiando desde hace unos cuatro meses una propuesta conjunta para llegar a un pacto europeo sobre inmigración. Se trata de un borrador, al que ha tenido acceso el diario El País, de apenas cinco folios que el Gobierno de Nicolas Sarkozy envió a España en el mes de enero en el que se apuesta por un control estricto de las fronteras y por la 'selección' de los extranjeros.

Además, indica el diario británico Financial Times, se quiere imponer un contrato de integración por el cual los inmigrantes deberían aprender el idioma y las costumbres del país teniendo en cuenta los "valores nacionales y europeos", una fórmula semejante a la planteada por el Partido Popular en la pasada campaña electoral. Los socialistas siguen mostrando su rechazo a esa idea.

El secretario de Estado para la UE, Diego López Garrido, ha explicado que España está trabajando con Francia en la definición del citado pacto y espera que en octubre pueda presentarse al resto de líderes de la UE para recibir su visto bueno. López Garrido consideró importante que Europa alcance un pacto sobre inmigración, basado en la defensa de los derechos fundamentales y que mire a la inmigración legal como un fenómeno positivo.

Medidas

Pero dejó claro que no se pueden poner "obstáculos innecesarios" a la llegada de unos trabajadores que cubren empleos que no quieren los nacionales. A su juicio, hay "cosas de perogrullo" que no es necesario poner por escrito, como que los inmigrantes deben respetar la ley del país de acogida, pues ya están obligados a ello, igual que los ciudadanos nacionales.

La finalidad de la propuesta, indica El País, es frenar la entrada masiva de inmigrantes en Europa con un mayor control de las fronteras, seleccionar a los extranjeros, agilizar las expulsiones, desarrollar políticas de asilo y aportar ayudas a los países de origen.