La Audiencia Provincial de Salamanca ha condenado a 8 años y seis meses de prisión a C.M.I., de 82 años, acusado de haber abusado sexualmente de su nieta desde que ésta tenía 8 años. El Ministerio Fiscal pedía 33 años de cárcel y la acusación particular, 60.

Según recoge La Tribuna de Salamanca, fue la propia víctima quien denunció los hechos y presentó como prueba una grabación con su teléfono móvil.

La joven, que en la actualidad tiene 25 años, sufría los abusos por parte de su abuelo cada vez que iba a visitarlo durante el verano, en la localidad salmantina de Villaflores. Allí, el condenado la forzaba con penes de madera y le practicaba sexo oral. Cuando comenzaron los abusos, la niña tenía 8 años y no denunció la situación porque entonces "pensaba que todo eran actos de cariño". Después, "el miedo y el reparo" hicieron que la situación se prolongara hasta que presentó la denuncia, el 5 de octubre de 2004.

Además de la pena de cárcel, el anciano no podrá acercarse a menos de 250 metros de su nieta, se le prohíbe comunicarse con ella y deberá pagarle una indemnización de 120.000 euros por los daños psicológicos sufridos.

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