Los hechos se produjeron el jueves 17 por la noche. El propietario de un local de hostelería llamó al 091 tras informarle un vecino de que unos jóvenes estaban tratando de entrar en su negocio.

La patrulla del Grupo de Atención al Ciudadano (G.A.C.) entrevistó al testigo, que facilitó la descripción de los sospechosos y les contó que tras escuchar unos ruidos sospechosos, observó a tres chicos huyendo de la zona.

El propietario del local comprobó que, aunque no habían logrado acceder al interior del local, una de las ventanas se encontraba fracturada.

La Policía Local localizó a tres jóvenes que se correspondían con la descripción de los sospechosos en una calle cercana, escondidos tras unos vehículos, y fueron detenidos.

Los dos mayores de edad fueron puestos a disposición judicial, mientras que el otro, que se había fugado de un centro de menores donde se encontraba internado por orden de la Fiscalía al haber delinquido anteriormente, fue reingresado en el centro.