De nombre Ayra, la perra ha conseguido volver a comer y llevar una vida completamente normal tras esta "complicada y exitosa" intervención, según una nota de prensa de AniCura Asturpet.

Desde el hospital veterinario se ha explicado que la tumoración que padecía, que se conoce como osteosarcoma maxilar, era de una medida de 71 milímetros y tenía una apariencia circular, de características especialmente grandes para este tipo de tumor, por lo que hubo que extirparle la mitad de la mandíbula.

La operación ha sido llevada a cabo por José Mario Larrinaga, Practice Manager y veterinario de AniCura Asturpet Hospital Veterinario, en Gijón, y su equipo de especialistas veterinarios, quienes se enfrentaron por primera vez a un reto de tales características.

"Si no le extirpábamos el tumor, era cuestión de meses que la perra falleciera", ha asegura Larrinaga. En total, fueron tres las operaciones por las que Arya tuvo que pasar hasta lograr la extirpación total del tumor y proceder al emplazamiento de un implante de titanio, diseñado a medida para el can, que le permite llevar una vida completamente normal.

"Está estupenda, tiene una capacidad de adaptación increíble", ha destacado la cuidadora de Ayra, quien ha incidido en que "físicamente no ha cambiado nada.