El presidente del Gobierno en funciones y candidato socialista a la reelección, Pedro Sánchez, ha asegurado este viernes que "la exhumación del dictador es una gran victoria de la democracia española".

Con estas palabras, pronunciadas en un mitin organizado por el PSOE en la Cúpula del Milenio de Valladolid, Sánchez se ha referido a la resolución aprobada en el Consejo de Ministros para que los restos mortales de Franco estén fuera del Valle de los Caídos antes del 25 de octubre.

"Acordémonos de que había algunos que decían que eso no iba a ser posible, pero al final la democracia española cumple siempre sus compromisos", ha rematado Sánchez, en su única alusión a la exhumación de Franco.

Además de fijar el 25 de octubre como límite para consumar la exhumación, el Consejo de Ministros ha acordado comunicar a la familia del dictador la fecha exacta con 48 horas de plazo, para que puedan asistir si lo consideran pertinente, según ha informado la vicepresidenta del Gobierno en funciones, Carmen Calvo.

Según el Gobierno, antes de 15 días habrá un operativo especial durante el proceso de exhumación que garantice "la seguridad necesaria y precisa para que se realice y ya se materialice definitivamente un acto de reconocimiento a las víctimas de la dictadura y a toda la sociedad española: que un dictador no siga siendo exaltado en forma alguna".

Asimismo, el Ejecutivo ha ordenado el cierre "inmediato" y "temporal" del Valle de los Caídos, que se ha hecho efectivo a las 18.00 de este viernes y, por consiguente, no podrá visitarse hasta que se haya procedido a la exhumación.

Durante el mitin y tras su reflexión sobre la exhumación, el presidente del Gobierno en funciones ha reclamado una alta participación en las elecciones del 10-N porque ve "muchas más razones para ir a votar" que en abril, y ha dicho que "las amenazas son más reales porque los desafíos siguen pendientes".

Asimismo, Sánchez ha alertado del "bloqueo" que imperará si no existe un mandato claro para un Gobierno que pueda afrontar "los desafíos" que tiene España por delante.

Crítico con la "sopa de letras" que observa "a izquierda y derecha" del PSOE, ha reconocido que España tiene como "amenazas" temas como el conflicto catalán y la inminente sentencia del Tribunal Supremo, la "pésima noticia" de la que "todo apunta" salida del Reino Unido de la UE y un "enfriamiento de la economía" que ha vinculado con las "guerras comerciales" planteadas por el presidente estadounidense, Donald Trump.

Sobre la situación económica que afronta España, Sánchez ha asegurado que dará "una respuesta progresista", en lugar de aplicar lo que, en su opinión, hizo "la derecha, que fue recortar el Estado del bienestar, subir los impuestos a la clase media y trabajadora y corromperse y corrromper a las empresas que contratan con lo público".

"Nosotros haremos frente al enfriamiento de la economía, si finalmente se sustancia, defendiendo el patrimonio de todos, que es el Estado de bienestar, defendiendo precisamente a la justicia fiscal, que no paguen más impuestos la clase media y trabajadora, sino que paguen más los que más tienen y haciendo una gestión transparente, honesta y ejemplar de los recursos públicos", ha resumido.