El equipo dirigido por Javier Clemente y que anteriormente trabajó a las órdenes de Lucas Alcaraz en las 26 primeras jornadas del campeonato, suma 30 puntos y es el décimo noveno clasificado, posición en la que concluirá la competición.

Su descenso es matemático desde hace tres jornadas, cuando perdió por 3-2 ante el Racing de Santander, y los puestos de permanencia quedan ya a 13 puntos de distancia.

Así pues, la temporada del cuadro murcianista ha sido un fracaso con mayúsculas y ello a pesar de que la primera vuelta transcurrió de forma muy satisfactoria para el club que preside Jesús Samper.

No en vano, el Murcia llegó al ecuador de la Liga con 22 puntos y ocupando la décimo cuarta posición, pero el final de la primera vuelta, con la derrota por 4-0 frente al Barcelona en el Camp Nou, marcó el inicio de la debacle.

Contando ese partido, el Murcia encadenó diez jornadas sin ganar, en las que sólo sumó un punto, y esa pésima racha resultó definitiva, pues el relevo en el banquillo tampoco hizo mejorar los resultados.

A falta de la última jornada, el cuadro grana ha sumado sólo 8 puntos en toda la segunda vuelta -2 victorias, 2 empates y 14 derrotas-, un paupérrimo bagaje que lo ha hundido en la clasificación.

Porcentualmente, el Murcia únicamente ha sumado el 14,8% de los puntos a los que ha tenido acceso en esta ronda y de las otras 17 campañas que ha estado en Primera, la segunda vuelta que más se acerca en lo negativo a la actual fue la primera que afrontó en la categoría, la 1940/1941, cuando logró el 22,7% de los puntos.