El fiscal solicitó ayer lunes, por la tarde, tres años y medio de prisión para Manuel Cid Conde, socio de Antonio Fontaneda, al considerar que fue "conocedor" de la estafa piramidal que afectó en 1999 a más de 250 inversores, mientras que pidió la libre absolución para el ex director del Banco Guipuzcoano Juan Pedro Echarri.

Durante su informe, el Ministerio Público explicó que fue Antonio Fontaneda quién ideó la estafa, si bien recalcó que Cid Conde conoció desde el principio, en contra de lo declarado por el acusado, que Fontaneda no tenía "intención alguna" de destinar el dinero de los inversores a operaciones inmobiliarias y artísticas.

Al corriente de los turbios negocios de Fontaneda

En ese sentido, el fiscal recordó que Antonio Fontaneda, condenado a tres años y 8 meses de cárcel como autor confeso de esta estafa de 7,7 millones de euros, declaró que Cid Conde estaba al corriente de todos sus negocios y que fue la persona que captó a la mayoría de los inversores en la oficina que tenía en San Sebastián.

Asimismo, incidió en el hecho de que en su oficina se realizaron los contratos a los perjudicados y que fue él el que les mostraba fotografías de inmuebles que supuestamente eran propiedad de Fontaneda para "convencerles" de que invirtieran en sus negocios.

Cobraba cinco millones de pesetas mensuales

También hizo hincapié en que Cid Conde recibió de Antonio Fontaneda una comisión de 10 millones de pesetas, además de cobrar mensualmente 5 millones de pesetas durante los meses que trabajó captando inversores, tras lo que incidió en que "estaba al corriente de todo".

Por contra, el fiscal pidió la libre absolución del ex director del Banco Guipuzcoano, Juan Pedro Echarri, ya que "no hay prueba alguna" de que supiera de las "intenciones" de Fontaneda, y apuntó que, además, no se ha podido probar que obtuviera beneficio alguno.

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