Álex Lequio ha demostrado que una recaída, como se hizo la primera vez, solo sirve para volver a levantarse. Y así lo ha demostrado con el último contratiempo que tuvo con el cáncer que ha padecido y que ha vuelto a superar.

O al menos eso se desprende de sus últimos titulares, ya que no solo tiene nuevos proyectos en marcha como una fiesta de disfraces para perros influencers, que cuenta con el apoyo de sus padres, sino que es capaz de mostrarse alegre y recuperado en sus apariciones con amigos.

Así ha sido, desde luego, como se le ha visto este fin de semana en el cumpleaños de su novia, Carola Monje, que cumplía 25 años y que decidió organizar una fiesta para su círculo más íntimo.

El empresario tiene 27 años y está viviendo una relación fabulosa con la joven desde que comenzaran a salir en abril. Monje, de hecho, se ha convertido en uno de los mayores apoyos del hijo de Ana Obregón.

La fiesta de cumpleaños se celebró en la Costa Brava, en el hotel Convent de Begur, que la cumpleañera conocía a la perfección dado que trabajó en la recepción del mismo como gerente.

Allí se reunieron varias de las amistades de Carola Monje, entre las que se encontraban diversas influencers de Barcelona, como Sara Rodés, Marta Gispert o Julieta Padrós, cuyas stories y fotografías han servido para conocer qué sucedió en la celebración.

Como los regalos que se llevaron quienes asistieron: un mechero (o varios) con la inscripción Carola's 25th, que se podría definir como "los 25 de Carola" o un ramillete de flores blancas. Aunque lo más importante fue ver a Lequio participativo y eufórico.

Así, en una de las stories de Gispert se puede ver cómo, ataviados todos de blanco (era una fiesta estilo ibicenca, excepto por la cumpleañera, que llevaba un largo y hermoso vestido rojo), cantan el Cumpleaños feliz a Monje mientras sopla las velas.

Allí se puede  observar a Lequio visiblemente contento y recuperado, sonriente fruto de la felicidad de su novia. Y porque Boby Puchum, el perro que adoptaron hace pocas semanas, también estaba en la fiesta recibiendo el cariño de todos (y con un ramillete al cuello).

No hay que olvidar que el hijo de Alessandro Lecquio y Ana Obregón aún está intentando recuperarse del "contratiempo" a primeros de mes con el cáncer y que le podrían llevar de nuevo al Memorial Sloan Kettering Cancer Center, el centro estadounidense donde ha sido tratado.

Al emprendedor, que abogó entonces, en una revista con ¡Hola!, por mantener el sentido del humor, le fue detectado este incidente en una revisión rutinaria pero pertinente, a la vista de las consecuencias, y estuvo ingresado siete días.