Las víctimas de los 31 agentes de la localidad madrileña de Coslada detenidos ayer en el marco de la operación Bloque, acusados entre otras cosas de extorsión y tráfico de drogas, han comenzado a relatar sus experiencias. Es el caso de Carlos Arroyo, comerciante, que asegura que las amenazas hacia él y su familia llegaron a tal punto que optó por abandonar Coslada. Lo cuenta en este vídeo:
El acoso de la mafia policial obligó a vecinos y comerciantes a marcharse de Coslada
- Carlos Arroyo habla de las amenazas: "Nos tuvimos que ir y lo más triste es que los políticos lo sabían".
- 31 policías detenidos en la operación Bloque.
- Extorsionaban a bares de copas y prostíbulos y traficaban con droga.
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