En concreto, el pleno de Mairena ha aprobado inicialmente la innovación undécima del PGOU del municipio, uno de cuyos tres aspectos aborda "la regulación del uso de gasolineras en solares calificados como urbanos o urbanizables", según ha explicado la portavoz del Gobierno local socialista, Marta Alonso, quien tras las protestas protagonizadas por vecinos de la urbanización Calahoya a cuenta de un proyecto de nueva estación de servicio junto a sus viviendas ha

asegurado que la idea es "actualizar y desarrollar con precisión la regulación de las gasolineras, haciendo compatible el desarrollo de la actividad mercantil con una respuesta a las peticiones ciudadanas".

La medida ha contado con el apoyo de todos los grupos salvo en el caso de Vox, cuyo edil, Juan Miguel Espinar, ha avisado de que la nueva regulación podría derivar en peticiones de indemnización al Ayuntamiento por los proyectos de estaciones de servicio en marcha, si bien el popular Ricardo Tarno ha defendido que esta regulación "viene a resolver una situación de inseguridad" que sufrían los vecinos y "no impide las licencias o proyectos de gasolinera", sino que las circunscribe a "las zonas urbanas consolidadas". Además, Ricardo Tarno ha considerado que cualquier indemnización que afrontase el Ayuntamiento sería "de una cuantía menor".

Desde las filas de Adelante, Laura Pérez ha manifestado también que esta regulación supone "un avance importante" al "establecer compatibilidades e incompatibilidades" y "criterios objetivos" en los proyectos de nuevas estaciones de servicio, rememorando el conflicto surgido en la urbanización Calahoya.

Finalmente, Antonio Conde ha agradecido que "el sector empresarial haya entendido" que la nueva regulación está destinada a promover "una Mairena más amigable y cercana", toda vez que el documento de aprobación inicial de esta innovación del PGOU ha sido aprobado con los votos a favor del PSOE, el PP, Adelante y Cs, y el voto contrario de Vox.