Agricultura ha agradecido, el éxito de este programa, después de que el pasado mes de junio se trajeran los primeros cuatro pollos de águila pescadora, dos nacidos en Baleares y otros dos en Cádiz, para iniciar la reintroducción de esta especie en la Comunitat, ha señalado la Generalitat en un comunicado.

Entre los lugares que se evaluaron para esta primera reintroducción, se escogió la Muntanyeta Verda, situada en el Parque Natural de la Marjal Pego-Oliva.

El proyecto nació por iniciativa de los ayuntamientos de Pego, Oliva, Denia y Xàbia, que propusieron a la Conselleria traer de vuelta como especie nidificante al águila pescadora, ya que las últimas parejas se refugiaron en el litoral de la comarca de la Marina entre los años 70 y principios de los 80.

El director general de Medio Natural y Evaluación Ambiental, Fran Quesada, ha explicado que la Conselleria aceptó de inmediato participar en este proyecto, ya que "la reintroducción y conservación de especies autóctonas que han desaparecido del territorio de la Comunitat Valenciana es uno de los principales objetivos de la dirección de Medio Natural".

En este contexto, ha apuntado que esta dirección pretende "devolver al ecosistema la mayor parte de especies animales que en la actualidad han desaparecido" y ha subrayado que este tipo de proyectos que cuentan con la colaboración e implicación de ayuntamientos, empresas y de voluntarios y asociaciones son los que les animan a participar activamente y a impulsar actuaciones similares.

Desde la reintroducción de los cuatro miembros de esta especie, los pollos han sido cuidados por personal contratado por la Generalitat, expertos de la Fundación Migres y voluntarios. Los animales fueron instalados en un jaulón de aclimatación que a lo largo del mes de julio se ha ido abriendo para permitir que comenzaran a volar en libertad.

Durante el mes de agosto, a pesar de algunas incidencias resueltas gracias a la labor de los especialistas que los cuidaban, las cuatro águilas han conseguido volar perfectamente, llegando incluso al sur de Francia y al Norte de Marruecos.

"Terminada la aclimatación, llega el momento de despedir a las águilas, que pronto comenzarán su migración invernal, y de agradecer a todas las personas y entidades que han creído y trabajado por recuperar esta especie para nuestro patrimonio natural", ha detallado Quesada.