Apareció... y no convenció. La tan esperada resurrección pública de Antonio Tejado no ha dejado buen sabor de boca entre sus compañeros. En especial de María Patiño, que sigue empeñada en que es algo mucho más grave para la ligereza con la que ella presume que se lo ha tomado el colaborador.

Lo primero que hay que aclarar es que Antonio Tejado llevaba alrededor de 85 días desaparecido hasta su encuentro este jueves con un reportero de Telecinco. Está pasando, decían quienes habían hablado con él, como su amigo Rafa Mora, por una"situación límite".

El sobrino de María del Monte estaba utilizando los meses del verano y las vacaciones para una desconexión plena, centrarse en sí mismo, en su salud, evitar los malos hábitos y salir adelante.

De ahí que su reaparición haya dejado algo perplejos a sus compañeros de Sálvame. Las cámaras del programa daban con él mientras paseaba orilla del mar y, aunque nadie sabe qué siente y piensa lejos de la televisión, lo cierto es que su aspecto distaba mucho de alguien que estuviera pasando por un bache vital de las características que se le presuponían al suyo.

Un tono, un carácter y una actitud fuerte y alegre que contrastaba mucho con aquella llamada que hizo al programa pocas semanas antes y que daban a entender que  estaba desesperado por mejorar por  las palabras que llegó a usar.

Pero ni rastro. El Antonio Tejado que apareció delante de los micrófonos y en la pantalla del espacio de Mediaset era otro, uno "recuperado" y que se mostraba sonriente, ameno y relajado.

El reportero José Antonio León abordaba así al tertuliano en el paseo marítimo y este respondía encantado a sus preguntas, queriendo convencer que su resurrección es algo total e irreversible.

"Estoy recuperado. He apartado lo tóxico. Ya no tengo malos hábitos de nada", comentaba el exconcursante de GH Dúo, que certificaba así un cambio de mentalidad en su vida.

"Ya únicamente bebo agua y hago dieta mediterránea. Ahora llevo una vida muy sana", revelaba Tejado en unas declaraciones que no gustaron en absoluto a su compañera.

Porque María Patiño ha seguido muy de cerca el caso del sobrino de María del Monte, que ella misma definió en plató como un "problema grave" delante del resto de colaboradores, y del que se mostraba orgullosa porque él hubiese sido capaz de "verbalizar" el delicado momento que atravesaba.

De ahí que no aceptara esa milagrosa y casi divina recuperación del exnovio de Ylenia y le ha mandado en directo un mensaje que a buen seguro hará reflexionar a Tejado.

"Lo que le está pasando no es un juego y no se cura con dieta mediterránea o paseando por la playa. Creo que se está mintiendo a sí mismo. Lo que le pasa a Antonio es muy serio", ha dicho, buscando que su colaborador y compañero deje de banalizar con algo que ella considera bstante más grave que la imagen que ha dado.

Por su parte, Tejado sigue con su actividad en las redes sociales, donde va mostrando poco a poco su vuelta a la normalidad, donde está jugando un papel primordial y especial su novia, Marina, con la que ha sentado cabeza.

De hecho, hace unos días, y lejos de cualquier rumor de crisis o problemas en la pareja, ambos fueron a visitar el Santuario de Nuestra Señora de El Rocío, en Almonte (Huelva), y lo inmortalizaron.