Mohamed V, rey de Malasia desde diciembre de 2016, ha cambiado de vida radicalmente en el último año, algo de lo que parece que el monarca se arrepiente. El sultán de 49 años se casó en noviembre de 2018 con Oksana Voevodina, una joven de 25 años que fue miss Moscú en 2015, y dos meses después anunció que abdicaba al trono.

En enero de 2019 renunció a su cargo cuando la pareja esperaba su primer hijo, que nació en abril. Sin embargo, su proyecto de familia duró poco, pues en junio emitieron un comunicado oficial para confirmar su ruptura y el comienzo de un complicado divorcio.

En este mensaje, el exrey de Malasia asegura que siente "una profunda tristeza y remordimiento ya que su error personal causó confusión a la gente". Desde que comenzó su relación, fueron muchas las fotos y detalles de su vida privada que se difundieron por redes sociales, provocando un escándalo y una presión social que le llevaron a abdicar para vivir su historia de amor sin problemas, una historia que se ha demostrado que estaba condenada al fracaso.

Aunque nunca se ha confirmado, los rumores indican que su renuncia a la Corona fue para preservar la intimidad de su mujer, de quien se decía que se habían filtrado unas imágenes comprometidas de su participación en un reality.

Según informó el Palacio de Kelantan, las redes sociales dieron lugar a información falsa que perjudicaba la reputación de Mohamed V, por lo que pidió a los ciudadanos que "no se dejaran influenciar fácilmente por afirmaciones falaces y difamatorias sobre él".

Una de las principales responsables de esto es la propia Oksana, quien pasó a llamarse Rihana tras convertirse al islam y casarse con el sultán. La modelo rusa cerró todos sus cuentas, pero ahora ha reaparecido en las redes sociales y ha compartido numerosas fotos con el que fuera rey de Malasia y con su hijo Ismail Leon.

Además, ha comenzado a contar cómo surgió su historia de amor con pelos y señales, haciendo que el Palacio de Kelatan tema que surjan nuevos rumores que menoscaben la imagen del sultán.

Por otra parte, mientras la que fue miss Moscú explica su versión de la historia, Koh Tien Hua, abogado del monarca, aseguró que "no hay evidencia objetiva" de que Mohamed V sea el padre biológico del pequeño.

El letrado también confirma que el sultán pronunció frente a dos testigos el precepto islámico "triple talaq", que significa divorcio, mediante el cual el marido solo ha de decirlo tres veces para terminar con su matrimonio. Todo ello, previo permiso de la corte, la cual emitió el certificado oficial el pasado 1 de julio. Aun así, Oksana Voevodina sostiene que a ella nadie la ha notificado oficialmente de la separación.

A pesar de esta alocada historia de amor a la que seguro que aún le queda algún que otro capítulo, Malasia tiene otro rey, Tengku Abdullah. El mandato de Mohamed V habría durado hasta 2021, pero, como de costumbre en este país del sudeste asiático, el consejo de sabios que consensúa quién gobernará se reunió y eligió a un nuevo Jefe Supremo del Estado.