El pasado sábado se celebró la tradicional corrida Goyesca en Ronda, Málaga, festividad a la que acudieron multitud de rostros conocidos. Entre ellos, Fran Rivera y su hija Cayetana, quienes terminaron convirtiéndose en protagonistas de la celebración debido al susto que se llevaron.

Una hora después de que empezaran los festejos, el torero abandonó la plaza con lágrimas en los ojos y rostro de preocupación, ya que su hija se había desmayado. Tana Rivera, quien se encontraba junto a su novio Quique González de Castejón en el callejón, sufrió un golpe de calor debido a las altas temperaturas.

Su padre la sacó en brazos y después los servicios sanitarios la llevaron en camilla hasta la enfermería de la plaza. Afortunadamente, todo quedó en un susto, pero Tana Rivera no volvió a la corrida. Su padre, sin embargo, sí regresó tiempo después.

No es la primera vez que le ocurre algo parecido la joven de 20 años, pues en diciembre estuvo ingresada durante tres días porque perdió el conocimiento. Desde ese día, han sido varias las veces en las que Tana Rivera se ha desmayado.

Su madre, Eugenia Martínez de Irujo, la ha llevado a numerosos médicos para que le realizaran diferentes pruebas, aunque, tal y como ha comentado a su círculo más cercano, "no le encuentran nada".

Fran Rivera asistió a la corrida Goyesca de este año junto a su mujer, Lourdes Montes, y a su hijo pequeño Curro, al que vistió de torero. Por su parte, Tana Rivera acudió por primera vez a la celebración junto a su novio, Quique González, un joven de 23 años amante del deporte y los toros.

La pareja hizo pública su relación hace apenas dos meses, pero, según cuentan, son amigos desde hace años.