Gracias a la colaboración ciudadana se tuvo conocimiento de una persona que solía acceder a un coto situado en Cárcar, donde cazaba desde su propio turismo. Se trata de una zona de caza menor, con amplia presencia de conejo, perdiz y codorniz.
Una patrulla de la Brigada de Protección Medioambiental se desplazó hasta la zona. Tras localizar el vehículo, le dieron el alto y comprobaron que el furtivo iba acompañado de tres niños. En el salpicadero del vehículo transportaba un rifle calibre 22 con mira telescópica, sin funda y municionado, ha informado la Policía Foral.
Los agentes inspeccionaron el interior del coche, donde encontraron restos de sangre, plumas, cajas con munición y más de 20 casquillos por el suelo y los asientos.
Los menores fueron recogidos por familiares y el cazador fue denunciado por infracciones a la Ley Foral de caza de Navarra (por cazar desde vehículo, con un arte prohibida -rifle del calibre 22-, en día inhábil, sin tarjeta del coto, con la licencia de caza de Navarra caducada y sin seguro), al Reglamento de armas (por portar un rifle del calibre 22 en un lugar no autorizado) y al Reglamento general de vehículos (por tener la ITV caducada).
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios