Calparsoro ha enviado hoy un escrito al Juzgado de Instrucción Número 1 de Haro en el que solicita la reapertura de las diligencias previas derivadas del atropello mortal del joven, y ha pedido que se tome declaración como imputado a Tomás Delgado Bartolomé, causante de la muerte de Enaitz Iriondo.

"Para nosotros es muy satisfactoria esta decisión del fiscal. Pretendemos desde hace tiempo reabrir la causa y poco a poco conseguimos avances. Es una victoria y estamos muy satisfechos", declaró Rosa María Trinidad. Trinidad agregó que "esperamos que la jueza decida reabrir el caso, lo mismo que el fiscal, y queremos que este caso se juzgue porque nunca se juzgó".

Cuestiones como la velocidad, ya que el conductor iba a entre 140 y 160 kilómetros hora, el punto de la colisión, que se debe aclarar aún, o la "posible influencia alcohólica" han sido decisivas para que Calparsoro decida que debe reabrirse el caso. El fiscal pidió que no haya un "juicio paralelo" al conductor porque "no se pide una condena, sino una investigación judicial".

Pidió una indemnización por los daños a su coche

Tres años después del accidente, Delgado pidió una indemnización de 20.000 euros a la familia por los daños sufridos en su coche, un Audi A-8, en el accidente. "Yo también soy una víctima en todo esto, lo del chaval no se puede arreglar, pero lo mío, sí", aseguró.

Delgado, ya había sido condenado por otro atropello en 1991 , en aquella ocasión arrolló a una madre y a su hijo en Pamplona y tuvo que indemnizarles con dos millones y medio de pesetas.

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