Según ha anunciado el Gobierno, el buque militar Audaz continuará su viaje hacia Lampedusa, a la espera de que se pronuncie la fiscalía italiana sobre lo que ocurrirá con los migrantes.

La vicepresidenta del Gobierno en funciones, Carmen Calvo ha afirmado que de esta manera el barco estará en disposición de "estar cerca" del puerto italiano "o de ir, si hiciera falta, en caso de que se ponga en marcha el reparto de inmigrantes al que habíamos llegado los seis países, coordinados por la Unión Europea".

En ese caso, añade, "estaríamos en condiciones de traer a España la parte proporcional que nos correspondiera".

Por su parte, la ministra de Defensa, Margarita Robles, ha recordado que España se comprometió a "acoger a un número de migrantes" y que piensa cumplir con esta responsabilidad, a pesar de que insisten en que la última palabra corresponde a la Fiscalía italiana.

Robles, que se encuentra en Gran Canaria para conocer la evolución del incendio forestal, ha dicho que le reconforta la decisión de levantar el bloqueo al barco y que de esta manera haya podido acceder al  puerto de Lampedusa porque la prohibición del ministro de Interior italiano Matteo Salvini "incumplía con unos mínimos éticos y humanitarios"

Ha afirmado que cuando España decidió enviar el buque de la Armada lo hizo por una cuestión "exclusivamente humanitaria" y la fiscalía "nos ha dado la razón".

"Es un drama humanitario" ha agregado la ministra, quién ha apuntado que desconoce los pormenores de la decisión judicial italiana y como evolucionarán los acontecimientos .

No obstante, ha señalado que en cualquier caso y en situaciones excepcionales como la de los inmigrantes del Open Arms, el Gobierno español "no va a mirar para otro lado".

El buque militar Audaz zarpó este martes poco antes de las 18.30 horas desde la base de Rota, casi de manera simultánea al anuncio de que el fiscal italiano decretara su desembarco inmediato de los inmigrantes. Se prevé que llegue a Lampedusa el viernes por la tarde.

Su comandante, Emilio Damiá Marqués, ha definido como su "primera misión real" ya que, ha recordado, el moderno navío de reciente construcción fue entregado a la Armada en julio de 2018.

"Lo que sé es que tengo que ir a Lampedusa y, una vez allí, ya recibiré instrucciones más concretas, y en función de cómo evolucione todo y lo que determine el Gobierno, pues así haremos", indicaba el comandante.

El presidente del Partido Popular, Pablo Casado, criticaba este miércoles los "bandazos demagógicos" que, en su opinión, está dando el Gobierno socialista en materia migratoria porque "son aprovechados por las mafias" y "solo conducen a más explotación" de los inmigrantes.

Así lo ha afirmado durante su visita a los municipios afectados por el incendio forestal de Gran Canaria, y ha aprovechado para recordar que el PP y Ciudadanos han pedido la comparecencia del presidente en funciones ante el Congreso para explicar la gestión de crisis humanitarias como la del Open Arms.

Casado ha asegurado que los "bandazos" del Gobierno muestran "improvisación" y son "el peor mensaje" que se puede dar a las "mafias" porque "aprovechan las crisis humanitarias" para seguir explotando a las víctimas que se suben a las embarcaciones "directas a la muerte".

Por ello, ha pedido al Gobierno que "sea más responsable, que se apoye también en la oposición y, sobre todo, que no dé estos bandazos demagógicos que solo conducen a más explotación para esta gente", refiriéndose a las migrantes.

Sobre el hecho de que el Buque Audaz zarpase ayer martes de la base naval de Rota (Cádiz) para asistir a los migrantes del Open Arms, poco antes de que la Fiscalía italiana permitiese el desembarco del Open arms en Lampedusa, Casado cree que cuanto menos hubo "mala planificación".

Además, se ha mostrado convencido de que con este tipo de actuaciones "las mafias" ahorrarán al utilizar aún peores embarcaciones para enviar a los migrantes a alta mar.