Una familia de Mijas tira su casa ilegal antes de que le llegue la orden de demolición

  • Aseguran que no podía pagar la multa de 4.000 euros al mes y tenían miedo de que le embargaran la vivienda a uno de sus hijos.
  • El chalé se había levantado en un suelo rústico de regadío.
  • La demolición no les exime de pagar la sanción por delito urbanístico.
  • CONSULTA AQUÍ MÁS NOTICIAS DE MÁLAGA
Aún no les ha llegado la orden de demolición de su vivienda en Mijas, pero ellos han decidido tirar abajo el chalé que estaban construyendo con irregularidades porque aseguran que no les queda otra solución. “Esto es una ruina", afirma Dolores Quero, la dueña, y una de las 3.000 afectadas por las casas ilegales del municipio.
Si el Ayuntamiento sabía que esto iba a pasar, no debieron darnos el permiso

Esta familia quiere acabar con las multas de 4.000 euros mensuales durante todo un año que habían estado recibiendo. Alegan que no pueden pagar ese precio. “He tenido que sacar un crédito y además tengo que pagar la hipoteca que pedí para construir mi casa", añade Quero a La Opinión de Málaga.

Por eso, ya desesperada, intenta evitar que embarguen la casa de su hijo por la imposibilidad de pagar las multas.

Son conscientes de que no han cumplido la ley, pero se quejan de que desde las administraciones públicas “no se nos ha ayudado".

Para esta afectada, si el Consistorio sabía que esto iba a pasar, “no debieron darnos el permiso para construir". Asegura que desde que comenzaron los problemas y vieron cómo a otros mijeños les llegaban las multas, la familia se ha ido reuniendo. Primero en solitario y luego a través de la plataforma de afectados, con el alcalde para solicitar toda la información posible y evitar que llegase este momento.

Un chalé en suelo rústico de regadío

La familia de Dolores levantaba una casa y una cochera de no más de 90 metros cuadrados situada en una finca de 20.000 metros en suelo rústico de regadío en la zona de La Alquería. En 2002 comenzaron con los trámites para construirla para su hija, Amelia, quien reconoce que habló con el concejal de Urbanismo. "Me dijo que la única manera de hacerme una vivienda allí era a través de un permiso de aperos", dice.

Hasta hace dos años no habían tenido problemas de ningún tipo, pero fueron los propios vecinos de Dolores quienes interpusieron la denuncia contra la construcción ilegal.

Paralización de la obra

Desde que recibieron la notificación de la primera denuncia, pararon la obra. "Para evitar que la cosa fuese a peor decidimos no hacer ningún avance más en la casa y esperar", explica Quero, pero desde que recibió la primera multa, se planteó acabar con el problema que tantas noches les ha quitado el sueño.

No obstante, la demolición no impide que los afectados deban pagar la correspondiente sanción por delito urbanístico, aunque ya haya demolido su casa.

CONSULTA AQUÍ MÁS NOTICIAS DE MÁLAGA

Mostrar comentarios

Códigos Descuento