El restaurante Fontaine aux Bretons, en Pornic, Francia, dio por error, el pasado 1 de agosto, un vaso de producto de lavavajillas en lugar de zumo de frutas a una niña de 22 meses, según el diario La Vanguardia.

Los padres han informado de que la niña puede "perder el esófago" aunque su vida "no corre peligro". Una vez que la pequeña dio el primer sorbo, vomitó. En un primer momento, no sospecharon que se tratara de una intoxicación, pero al probar el líquido, los padres notaron una "quemazón en la boca", propia de sustancias no aptas para el consumo humano. El padre asegura que le dieron "sosa caústica"a su hija, y ha presentado una denuncia contra el restaurante por "negligencia grave".

Por otro lado, el restaurante ha explicado en un post de Facebook que todo ha sido "una sucesión de accidentes". El equipo de cocina ha afirmado sentirse "devastado" por el incidente y ha dado su apoyo a la niña y a su familia. Se han comprometido a realizar una revisión completa de todos sus procedimientos para evitar este tipo de accidentes.

La Policía de Pornic está investigando los hechos. Según medios locales, un empleado habría llenado un recipiente de zumo de frutas con este lavavajillas, otro lo habría metido en el frigorífico pensando que era realmente zumo y otro trabajador lo habría servido.