Juzgarán a un ciudadano de Sierra Leona por abusar de sus dos hijas menores

  • Amenazó con enviar a África a la menor si no se acostaba con él.
  • Les hacía ver películas pornográficas.
  • CONSULTA AQUÍ MÁS NOTICIAS DE PONTEVEDRA

La Sección Cuarta de la Audiencia de Pontevedra juzgará la próxima semana a un ciudadano de Sierra Leona, Unisa M., en prisión preventiva desde 2007, por el presunto abuso sexual de sus dos hijas, menores de edad, a las que trajo a España en 2002, informaron hoy fuentes judiciales.

Los hechos ocurrieron en junio de ese año cuando, según reza el escrito de acusación del fiscal, el acusado entró en la habitación en la que dormía su hija menor, de 13 años, y "tras desnudarse él y desnudar a la muchacha, intentó abusar sexualmente de ella". Como la adolescente lloraba, el acusado le pidió que estuviera tranquila y le contó que "era normal que los padres se acostaran con sus hijas".

Amenazas y masturbaciones

Con la misma intención se acercó posteriormente a su otra hija, un año mayor que la anterior, amenazándola con enviarla de vuelta a África si no accedía a acostarse con él.

"Posteriormente repitió esta actividad dos veces al mes, obligando constantemente a la menor a mantener relaciones sexuales con él", añadió. También obligó a su hija a ver películas pornográficas en su compañía "exigiéndole que lo masturbara".

Además, también atentó contra la dignidad humana de las adolescentes, según el fiscal, porque las obligaba, especialmente en época escolar, a que se levantaran a las seis de la mañana para limpiar la casa y hacer la comida antes de salir para el instituto, insultándolas en numerosas ocasiones y amenazándolas de muerte tanto a ellas como a su madre.

A menudo les decía que avisaría a un amigo en Sierra Leona para que "las hiciera sufrir", ya que su progenitora continúa viviendo en el país africano. Según el fiscal, el acusado mantenía con frecuencia encerradas a sus hijas en casa, no les dejaba salir con amigos y en alguna ocasión las castigó sin comer.

Secuelas psicológicas

Estos comportamientos eran especialmente vejatorios para la hija menor, ya que ésta se negaba a mantener relaciones sexuales con él, lo que aumentaba el número de veces "que recibía palizas", agregó el escrito del Ministerio Público. Como consecuencia de todos estos hechos, la menor de las hermanas sufre secuelas psicológicas tales como hipocondria y depresión suicida, sentimientos de culpabilidad, apatía y desajuste psicológico. Algunos de estos problemas también los padece la otra hija del acusado.

Por todo ello, el fiscal exige contra este ciudadano de Sierra Leona que se le apliquen 15 años de prisión por cada uno de los 31 delitos de violación, nueve años de prisión por agresión sexual, así como dos años y medio más por maltrato en el ámbito familiar y la retirada de la patria potestad de las menores.

También se solicitan indemnizaciones de 30.000 y 25.000 euros para cada una de las dos hijas del acusado. El juicio se celebrará los días 22 y 23 de este mes a las diez menos cuarto de la mañana.

CONSULTA AQUÍ MÁS NOTICIAS DE PONTEVEDRA

Mostrar comentarios

Códigos Descuento