La investigación se inicio tras presentar denuncia la víctima ante la Policía Nacional, manifestando que personas desconocidas habían accedido a su establecimiento y tras provocar daños para acceder al interior del local, habían sustraído la caja registradora con el dinero en efectivo que contenía en su interior y algunas bebidas.

Dado que el establecimiento contaba con cámaras de seguridad, los investigadores iniciaron sus pesquisas en esa dirección, tratando de identificar a los presuntos autores de los hechos, según ha explicado la Policía Nacional en una nota.

Tras la investigación y una vez identificados los presuntos autores, se estableció un dispositivo policial que dio como resultado la localización y detención de tres varones de nacionalidad española,

que una vez detenidos fueron trasladados a la Jefatura Superior de Policía de Navarra para la práctica de diligencias policiales.

Uno de los investigados, pese a ser mayor de edad en el momento de su detención, había cometido este hecho siendo aún menor de edad, motivo por el cual, tras su detención, la Fiscalía de Menores dispuso que fuera entregado a sus padres.

Los otros dos detenidos fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia de Pamplona una vez terminadas las diligencias policiales, que también fueron remitidas al órgano judicial.