Agentes de la Policía Nacional, así como de la Policía Local de Las Palmas de Gran Canaria y bomberos de la capital  encontraron en la noche del 21 de junio los cuerpos sin vida de dos hermanos, de 70 y 74 años, en el interior de una vivienda.

Un de los ancianos, con un importante grado de dependencia, falleció tras morir en su misma casa el hermano que lo cuidaba, sin que nadie se diera cuenta ni echara en falta a ambos durante días.

Según adelanta este martes "Canarias 7", los cadáveres en "avanzando estado de descomposición" de los dos hermanos, de 74 y 70 años, fueron hallados el pasado 21 de junio después de que los vecinos avisaran del fuerte olor que salía de su vivienda, situada en la calle Angostura del barrio de La Isleta.

Fuentes de la investigación han corroborado que ninguno de los hermanos presentaba signos de violencia y que tampoco se observó en la primera inspección de la vivienda indicio alguno que hiciera pensar en otra causa de la muerte que no fuera la natural.

Las autopsias confirmaron después esa hipótesis: llevaban ya varios días muertos cuando fueron hallados, pero con una evidente diferencia entre el hermano pequeño, que murió primero, y el mayor, que pereció tiempo después.