Era el 4 de julio de 1999 cuando el star system mundial se paró ante una de las bodas más sonadas y a la vez más íntimas del final del milenio. Aquel día se daban el "sí, quiero" una de las parejas que más titulares acaparaba: comenzaba el imperio de David y Victoria Beckham.

la pareja se conoció en 1997, pero no se dieron siquiera los teléfonos. No importaba: él triunfaba como futbolista del Manchester United y ella, por entonces Victoria Adams, una de las cinco integrantes de uno de los grupos más icónicos de la última década del siglo XX, las Spice Girls, a la cual se la conocía como la posh (la "pija"). Se volverían a encontrar. ¿Cómo han llegado a ser una de las parejas más ricas e importantes a nivel global?

Es curioso que a Gary Neville, su compañero en Old Trafford, David Beckham le comentase en 1996, una vez que vio bailando a Victoria con un traje de cuero negro, guantes y botines en mitad del desierto en el videoclip de Say you I'll be there. "Esa chica está hecha para mí y voy a conquistarla".

Poco tiempo después, la propia madre de la cantante aseguraba al Sunday Mirror que "David será bienvenido en nuestra familia". Para cuando llegó la ceremonia, uno de los 29 asistentes fue su hijo Brooklyn, que ya contaba con 4 meses de edad.

El jugador de la selección inglesa, con su reconocible media melena rubia, y la Spice Pija iban al altar en Luttrellstown, un castillo cercano a Dublín, vestidos ambos de blanco. Ella, además, con un vestido de Vera Wang rematado por una corona de oro.

Comenzaban a marcar tendencia, tanta, que hasta se editó un libro sobre su enlace, que les costó alrededor de 750.000 euros de la época, pero que quedó amortizado pues la exclusiva les reportó el doble. Los 250 invitados de la fiesta posterior les vieron cortar la tarta de 3 pisos vestidos a juego de morado.

El excentrocampista, que luego pasaría a ser uno de los galácticos del Real Madrid, recordó en 2017 en la BBC que, visto hoy, aquello era ridículo. "El [vestido] de Victoria estaba bien. Yo parecía uno de los tipos de Dos tontos muy tontos. Incluso tenía un sombrero de copa. Increíble. ¿En qué estaba pensando?", bromeó.

Poco importaba. Ya eran los Beckham, una familia que es en sí misma una marca y cuyo patrimonio, aunque desconocido, siempre se estima en cantidades astronómicas: según The Times, 355 millones de libras (unos 396 millones de euros), y estando entre las 50 personas que más impuestos pagan en Reino Unido; The Mirror asegura que poseen 750 millones de libras (836 millones de euros); y para Forbes solo David Beckham, de los 10 deportistas retirados que más dinero ganan del mundo, habría acumulado casi 800 millones entre contratos deportivos y publicitarios.

A esto hay que sumar lo que afirma el diario The Sun: David Beckham gana, al día, 40.000 euros por derechos de imagen, gracias a sus acuerdos con H&M, Adidas, L'Oréal o Samsung.

Además, tienen varias empresas para llevar sus enormes cuentas: Beckham Brand Holdings Limited, se encarga de las iniciativas comunes con fines comerciales; Footwork Productions se ocupa de los ingresos que provienen del mundo del fútbol mientras que DB Ventures hace lo propio con la imagen del exjugador para las grandes marcas.

Aparte, es preciso señalar Victoria Beckham Limited. Ella, que ha olvidado tanto su pasado que ha decidido no subirse al escenario con sus excompañeras de la girlband, tiene tasada su empresa de moda en más de 100 millones de euros, puesto que factura unos 120 millones anuales.

Su trabajo le ha costado ser una reconocida empresaria del sector fashion cuando empezó hace 11 años pero actualmente viste a Madonna o Jennifer López. Su empresa tiene cerca de 200 empleados, tienda online en 50 países y dos boutiques: Londres y Hong Kong.

Ya tiene una línea de ropa deportiva en colaboración con Reebok y a fines de este año saldrá una nueva dedicada a la belleza. Victoria Beckham Limited es una de las compañías más respetadas y fructíferas del suelo británico. "Aunque intento dar pequeños pasos, el negocio está creciendo muy rápido. Nuestro volumen de ventas ha aumentado un 120% cada año. Creo que eso es muy impresionante para cualquier estándar", fueron sus palabras (¡en 2011!) a The Telegraph. No se equivocaba.

Pero aparte de ello (y de sus numerosas casas: una en el selecto barrio londinense de Holland Park, valorada en 36 millones; otra en los Cotswolds, la campiña británica, tasada en unos 6,7 millones; y en 2018 vendieron su propiedad en Los Ángeles por 30 millones de euros), ¿qué tienen los Beckham para ser imitados como ejemplo de power couple (pareja poderosa) por gente como Beyoncé y Jay-Z, Kim Kardashian y Kanye West o incluso sus amigos, Sergio Ramos y Pilar Rubio? Pues algo distintivo: felicidad.

Ambos han dicho, pese a algunos rumores, que son más fuertes juntos que por separado y que si siguen juntos después de dos décadas continuadas en el foco de atención es exclusivamente por la razón primera: se siguen queriendo como el primer día.

Lo demostraron recientemente, en el Festival de Glastonbury, donde se les vio bailando, sacándose selfies y fotos y haciéndose arrumacos y carantoñas, como dos adolescentes que poseen la Orden del Imperio Británico (él la consiguió en 2013 y ella el año pasado).

Aunque el imperio no se acabará con ellos, pues la firma Beckham tiene mucha vida por delante: a Brooklyn le siguió Romeo, en 2002; Cruz nacido en febrero de 2005 en Madrid; y la pequeña, Harper Seven, a punto de cumplir ocho años.

Brooklyn, el mayor, se dedica a la fotografía y ya ha coseguido exponer su obra en Christie's, así como es conocido también por sus relaciones: estuvo saliendo con la actriz Chloë Grace Moretz y actualmente lo hace con la modelo Hana Cross.

Romeo, por su parte, es el que más ha salido a sus padres y se está labrando un nombre en el mundo de la moda, posando para Vogue o Burberry, mientras continúa con su deporte favorito: el tenis. Cruz quiere ser cantante y sube vídeos a sus redes sociales interpretando canciones famosas.

Harper Seven, aparte de pasárselo en grande con su padre viendo a la selección inglesa estos días en el Mundial de Fútbol, marca tendencia de lujo: celebra sus cumpleaños en el Palacio de Buckingham.

Ambos han querido celebrar estos 20 años, además, en su Instagram. Primero, Victoria, que con un sencillo pero elocuente "20 años hoy. Te quiero tanto. Besos" ha acompañado un montaje que repasa su vida conjuntamente a través de estas dos  décadas.

Por  su parte, David ha optado solo por cuatro fotografías (dos del día de su boda, una tercera que puede ser de las más reconocibles de la pareja y una cuarta con todos sus hijos y ha escrito "Guau, 20 años. Mira lo que hemos creado. Te quiero tanto". Pues eso. Guau.