Bar Sorginzulo de Bilbao gana el Concurso de Pintxos Idiazabal con un talo de mousse de queso en forma de cresta punki

  • Un talo crujiente de maíz y membrillo, relleno de una mousse de queso Idiazabal de pastor y crujiente de pistacho, con forma de cresta 'punki' y colocado sobre una calavera, elaborado en el bar Sorgintzulo de Bilbao, es el pincho ganador del 'VI Concurso de Pintxos de Queso Idiazabal de Pastor del Casco Viejo de Bilbao', que ha entregado este jueves la Asociación de Comerciantes del Casco Viejo.
Talo de mousse de queso en forma de cresta punki elaborado por el Bar Sorginzulo de Bilbao, ganador del V Concurso de Pintxos Idiazabal
Talo de mousse de queso en forma de cresta punki elaborado por el Bar Sorginzulo de Bilbao, ganador del V Concurso de Pintxos Idiazabal
ASOCIACIÓN DE COMERCIANTES DEL CASCO VIEJO DE BILB
Talo de mousse de queso en forma de cresta punki elaborado por el Bar Sorginzulo de Bilbao, ganador del V Concurso de Pintxos Idiazabal

Además, la Asociación de Comerciantes del Casco Viejo de Bilbao, organizadora del certamen gastronómico, también ha entregado el premio de la votación popular, establecido por los clientes que han votado en los diferentes bares, y que ha ido a parar al Café Lago, por un chipirón con queso Idiazabal. El concurso, en el que han participado 23 locales hosteleros del enclave histórico bilbaíno, se ha celebrado entre el 11 y el 23 de junio

El jurado, que decidió premiar al pincho del Sorginzulo en las dos categorías del concurso -Zazpikaleak y Creatividad-, ha destacado el "poderoso" sabor a Idiazabal de la composición, además de la "originalidad" tanto en los ingredientes como en la manera de presentarlo. Iñaki Lazkano y Matías Varanini, los cocineros del Sorginzulo, fueron construyendo el pincho poco a poco, hasta dar con el que han denominado "Talogaztapunk".

"Tiene mucho trabajo detrás; hacemos el talo con harina de Maruri y lo pasamos también por la sartén para darle un toque crujiente;

luego la mousse, con un 70% de Idiazabal, y además el crujiente de pistacho y cuñitas de queso para hacer la cresta", ha explicado Lazkano. Además, Varanini ideó los soportes metálicos, construidos en 3D y en exclusiva para este pincho.

Así, el Sorginzulo, que el año pasado recibió el premio al 'Mejor bar de pintxos de Euskal Herria', ha ganado por segunda vez este concurso -la anterior fue en 2014-, además de obtener, el año pasado, el premio popular.

El jurado del concurso, compuesto por cocineros y críticos gastronómicos, entre otros, ha destacado, también, la versatilidad del queso en los pinchos y el resultado de la innovación en los fogones del Casco Viejo.

Así, la mayoría de los pinchos presentados han consistido en creaciones de mucha elaboración y, al mismo tiempo, muy atrevidas respecto a sabores y presentaciones. La mayoría de los establecimientos participantes han eludido los pinchos clásicos y han optado por creaciones en las que el queso era un acompañante a ingredientes muy diferentes, desde frutas tropicales, a especias diferentes, muy diferentes salsas e, incluso, pintxos dulces.

Entre las 23 composiciones presentadas a este concurso, figuraban pintxos en los que el queso podía ser el elemento principal o un acompañante. Carpaccio de calabacín, carrillera de cerdo, anchoas y mermelada de piquillos, canelón de manzana relleno de crema, gofre y hasta ostras con unas perlitas de queso, han sido algunas de las recetas.

La Asociación de Comerciantes del Casco Viejo de Bilbao ha entregado esta mañana los premios, consistentes en una txapela y un trofeo a los ganadores, así como las tres tarjetas Opari Kutxa Bank, de 100 euros cada una, sorteadas entre los clientes participantes en las votaciones.

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