En total, Caritas atendió el año pasado a 31.579 personas, con cinco casos de emergencia humanitaria, 765 personas acompañadas por el área de empleo, 969 por igualdad y 1.345 por vivienda.

Los datos, de la memoria anual de la entidad, presentados este jueves reflejan, según el director de Caritas, Víctor Mellado, que la exclusión "severa no mejora, sino que se incrementa". Y lo ha argumentado en el hecho de que los proyectos residenciales de la provincia están "saturados", ya que cada vez se encuentran "más personas solas y sin recursos".

"Tradicionalmente eran familias más grandes", ha indicado y ha evidenciado que el "desarraigo" es cada vez "más grande" entre vecinos y familia.

Por su parte, Francisco Javier Ruvira, secretario general de Caritas Alicante, ha detallado que se está produciendo una "polarización" de la sociedad con cerca del 20% de la población que tiene "muchos nubarrones" en su futuro inmediato.

Así, ha hablado de tres factores de exclusión: Empleo, Salud y Vivienda. En cuanto al empleo ha razonado que es "el primer factor" de exclusión y ha apostado por un empleo "fuerte, digno y regulado por contrato" para ofrecer una "estabilidad" desde la que "hacer planes de futuro".

Sobre la Salud, Ruvira ha explicado que "hay mucha gente lejos de tener resuelto el tema" y ha reclamado para ello una "mejora" de la interconexión entre los recursos sociales y el sistema sanitario. En este sentido, se ha referido a la situación de personas con VIH y con salud mental, "muchas" de las cuales no están diagnosticadas.

"Una sociedad sana se mide por cómo cuida a los más débiles", ha planteado y se ha referido a la realidad del mercado de la vivienda y en la proliferación del chabolismo.

Al respecto, sobre la inmigración y los refugiados, Ruvira ha señalado que huyen de situaciones difíciles y se encuentran con que se "tarda meses en conseguir un permiso o una tarjeta".

Finalmente, ha comentado de la prostitución que es una realidad "visible" y al mismo tiempo "invisible" que supone "humillación" e "inhumanidad" para las víctimas de las mafias y para lo que Caritas "está empeñada en dar una solución".

"Las grandes cifras disminuyen", ha explicado pero ha contrapuesto que "las personas en exclusión son "más difíciles de mover" por los "obstáculos" a los que se enfrentan.